La exploración espacial no para de avanzar, y hoy se dirige hacia un nuevo horizonte: las minilunas, pequeños asteroides atrapados temporalmente por la gravedad de la Tierra.
PUBLICIDAD
Se trata de cuerpos celestes que pueden orbitar nuestro planeta durante años antes de retomar su curso por el sistema solar, y representan un campo de interés creciente para la comunidad espacial.
Descubrimiento de las minilunas
Identificadas por primera vez hace 18 años por el Catalina Sky Survey, la miniluna 2006 RH120 fue la primera en ser descubierta, seguida por otra denominada CD3 en 2020.
Recomendados:
¿Globo espacial? Descubren un planeta gigante pero tan ligero como el algodón de azúcar
NASA busca construir un tren robot que levita para su misión Artemis en la Luna: así es FLOAT
La Luna es un oasis: científicos chinos encuentran agua en los cristales lunares
Estas pequeñas compañeras de la Tierra miden entre 2 y 3 metros de largo, y ya están empezando a llamar la atención hacia una posible investigación espacial.
¿La razón? Su estudio promete ofrecer nuevas pistas sobre la formación del sistema solar y los cuerpos celestes que lo componen.
Lo que sabemos de las minilunas
Para empezar, hasta ahora se cree que su origen se remonta al cinturón principal de asteroides, ubicado entre Marte y Júpiter.
Asimismo, las minilunas son consideradas cápsulas del tiempo, ya que preservan el estado original del sistema solar. Es por eso que su estudio podría revelar datos sobre la formación de asteroides y la dinámica del sistema Tierra-Luna.
Y, tras casi dos décadas desde su descubrimiento, al fin podrían ser exploradas. Misiones como las sondas japonesas Hayabusa al asteroide Ryugu y la sonda OSIRIS-REx de la NASA al asteroide Bennu nos demostraron la viabilidad de recolectar muestras de asteroides y traerlas a la Tierra para su análisis.
Por ahora falta afinar ciertos detalles, debido principalmente a que el desafío está en la detección de estas minilunas, que, debido a su pequeño tamaño y rápida órbita, hacen que su localización sea complicada.
Pese a ello, la comunidad científica está determinada a continuar la búsqueda de estas lunas temporales. ¿Será este el próximo capítulo en la exploración espacial?