En medio del drama político y las tensiones tecnológicas, TikTok encontró una forma de seguir funcionando en Estados Unidos sin (supuestamente) ser 100% chino. El nuevo plan, impulsado por la administración Trump, propone una reestructuración en dos empresas separadas. Pero las cosas no son tan simples como parecen.
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Según fuentes cercanas al acuerdo, ByteDance seguirá siendo dueño de la parte más jugosa del negocio, mientras que una nueva empresa conjunta gestionará los datos de los usuarios estadounidenses y el todopoderoso algoritmo de recomendaciones. ¿Desvinculación real o maquillaje empresarial?
¿Qué rol tendrá ByteDance?
Bastante más del esperado. Aunque la empresa china cederá el control de los datos, contenido y algoritmo a la nueva compañía estadounidense, seguirá controlando las operaciones comerciales como la publicidad y el comercio electrónico. O sea, el dinero sigue fluyendo hacia Pekín.
Además, ByteDance sería el mayor accionista minoritario de esta nueva entidad encargada del backend de TikTok en EE. UU. ¿Confuso? Sí. ¿Sospechoso? También.
¿Qué dice el Congreso?
No todos están contentos. El congresista John Moolenaar, presidente del Comité Selecto de la Cámara sobre China, ya adelantó que va a investigar a fondo este nuevo esquema.
Según él, la ley firmada en 2024 deja en claro que ByteDance no debería tener ningún tipo de conexión operativa con el “nuevo TikTok”, y mucho menos acceso al algoritmo. “La ley fue clara: nada de atajos, nada de lazos ocultos. Esto se tiene que revisar con lupa”, afirmó.
¿Qué se sabe del nuevo TikTok estadounidense?
Según las filtraciones, el TikTok que seguiría operando en EE. UU. se dividiría así:
- Una empresa conjunta, en parte con Oracle y otros inversores, se encargaría de los datos de usuarios, el backend y el algoritmo.
- ByteDance conservaría la propiedad total de otra división, centrada en generar ingresos: publicidad, e-commerce, etc.
- La nueva compañía estaría valorada en 14.000 millones de dólares.
Esto se parece más a una reingeniería corporativa que a una verdadera venta. De hecho, medios chinos como LatePost y Caixin confirmaron este esquema... aunque después borraron sus artículos sin explicación.
¿Y Trump qué opina?
Para Trump, TikTok es oro electoral. Asegura que la plataforma fue clave para su victoria en las últimas elecciones, y ahora tiene más de 15 millones de seguidores en su cuenta. Incluso la Casa Blanca abrió una cuenta oficial el mes pasado. ¿Coincidencia? Lo dudamos.
¿Una solución real o solo un parche?
Aunque este nuevo modelo podría evitar una prohibición directa de TikTok en EE. UU., no elimina por completo las preocupaciones sobre seguridad y soberanía de datos. ¿Es suficiente con aislar el backend si los ingresos siguen ligados a una compañía china?
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Lo único claro es que TikTok seguirá en los celulares de 170 millones de estadounidenses. Lo que no está tan claro... es quién controla realmente el show detrás de escena.