El principal socio comercial de la NASA, SpaceX anunció que dejará de fabricar las famosas naves espaciales Crew Dragon. Estas cápsulas son de las más utilizadas en los últimos años por la agencia espacial norteamericana, para sus viajes a la Estación Espacial Internacional (ISS).
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Las Crew Dragon, que se destacan por ser reutilizables en diferentes misiones, la NASA envía cargamentos y astronautas hacia la ISS.
Resalta por formar parte de la primera flota comercial que la agencia espacial norteamericana utilizó para viajar al espacio; antes era un tema exclusivamente gubernamental o de gasto público. Y como sabemos esto es neta inversión privada de la empresa que dirige Elon Musk.
Con esta decisión de la corporación a cargo de Elon Musk, la NASA se pone aprietos ya que la otra opción que tiene para viajar al espacio, son las cápsulas Soyuz, sondas y cohetes de manufactura rusa que en la actualidad no serían una opción debido al conflicto entre Rusia y Ucrania.
Sin embargo, los representantes de SpaceX sostienen que aunque no fabricarán nuevas Crew Dragon, en los galpones se seguirán produciendo partes mecánicas para el mantenimiento de las que ya existen. De ser posible quieren extender su vida útil.
Una Crew Dragon, según reseña El Confidencial, está preparada para realizar al menos unos cinco viajes. SpaceX tiene cuatro unidades. Esperan incrementar el número de millas que soporta la nave espacial.
¿Por qué el freno de SpaceX para las Crew Dragon?
De acuerdo a la información cortesía de El Confidencial, SpaceX atraviesa algunos inconvenientes económicos y evita caer en banca rota. Por tal motivo decide poner freno en las Crew Dragon y así fortalecer la inversión hacia la monstruosa Starship, que todavía está en una extendida etapa de prueba.
La presión se eleva para los científicos que trabajan detrás de la fabricación y funcionamiento de la Starship, que según los cálculos económicos de Elon Musk ya debería estar viajando para entregarle ganancias.
Pero lamentablemente ocurre todo lo contrario. Un par de explosiones, de las que Musk dijo en su momento que eran parte de lo que tenían previsto, ahora nos muestra un panorama complejo por la premura del magnate de que se resuelvan todos los detalles y la máquina entre en funcionamiento.
El mismo portal cita un mensaje que Elon Musk le envió a sus empleados vía correo electrónico, en el que dice que existe “un verdadero riesgo de quiebra si no conseguimos que Starship vuele al menos una vez cada dos semanas el próximo año”.
De esta manera, la carrera por la fabricación de cohetes espaciales acelera su paso con la intención de evitar mayores problemas económicos y que el sueño de Musk -misión tripulada a Marte- se mantenga en pie.