Elon Musk al parecer es un muchacho muy ocupado, y contactarlo por vía telefónica debe ser casi imposible luego de que el genio publicara por accidente en Twitter su número de contacto privado. Así que al parecer una compañía japonesa decidió implementar una medida creativa: poniendo un enorme letrero afuera de las oficinas de SpaceX.
GROOVE X es una empresa enfocada al terreno de la robótica, con un capital inicial de inversión cercano a los USD $57 millones, fundada por Kaname Hayashi, uno de los responsables por la creación del robot Pepper.
Y ahora, su siguiente gran meta, al parecer, es lograr que Elon Musk ponga uno de sus nuevos autómatas, desarrollados bajo el nombre clave de LOVOT (mezcla de Love con Robot), dentro de sus cohetes:
Según reporta el Business Insider, Hayashi colocó un anuncio enorme junto a las oficinas de SpaceX, como un guiño hacia Elon Musk y su gusto por los toppings extra grandes (mashi-mashi) en la cadena de comida oriental Ramen Jiro, con la intención de poder establecer diálogo con él, para que su misión a Marte incluya algunos LOVOTS:
El ejecutivo no habló mucho sobre las cualidades distintivas de su autómata, pero asegura que será posible comunicarse de manera no verbal con el LOVOT.
Es original la manera de plantear públicamente la propuesta a Musk, pero casi luce como acoso. ¿Funcionará?
