Cuando Elon Musk presentó el Cybertruck, allá por 2019, parecía que el futuro llegaba en forma de trapezoide de acero inoxidable. Años después, la historia se ha torcido. Lo que debía ser un ícono de la revolución eléctrica, hoy circula por el mercado como una rareza con ventas muy por debajo de las expectativas. ¿Qué está haciendo Musk al respecto?
Te puede interesar: [Hay un problema con los satélites de Elon Musk: Es están cayendo demasiado rápido]
Bueno, en lugar de admitir la derrota, parece estar moviendo algunas piezas... dentro de sus propias empresas.
El Cybertruck: de boom mediático a caída libre
En 2023, Musk prometía cifras astronómicas: entre 250.000 y 500.000 unidades vendidas por año. Pero 2025 llegó con una dosis de realidad mucho más modesta: apenas 20.000 unidades vendidas en total, según datos recopilados por Futurism. Y de esas, muchas no habrían salido precisamente al mercado libre.
Durante el tercer trimestre de este año, Tesla reportó solo 5.385 Cybertrucks vendidos, lo que representa una caída del 63% respecto al mismo periodo del año anterior. En términos anuales, incluso contando las compras internas, la cifra apenas llega a 16.000 unidades.
¿Un truco bajo la manga? Pedidos “familiares” al rescate
Según Electrek, Musk podría estar recurriendo a una estrategia para maquillar esos números. ¿La receta? Vender Cybertrucks no vendidos a empresas que también son suyas. SpaceX, su compañía de exploración espacial, ya habría recibido “cientos de unidades”, y se espera que ese número se eleve a “miles” en los próximos meses.
Por si fuera poco, xAI, su nueva startup de inteligencia artificial, también ha recibido vehículos. La jugada no es ilegal ni secreta, pero sí levanta cejas: ¿estamos ante una demanda real o ante una táctica para evitar que los números luzcan como lo que realmente son?
Diseño futurista, problemas bien presentes
Lo cierto es que el Cybertruck no ha sido el fenómeno comercial que se esperaba.
A pesar de su estética salida de una película de ciencia ficción y de las promesas de rendimiento extremo, el vehículo ha acumulado ocho retiradas del mercado por problemas de diseño, una autonomía limitada, y un precio elevado que no ha ayudado a enamorar a los compradores.
Por si fuera poco, el valor de reventa se ha desplomado, algo letal para un coche que muchos consideraban una inversión segura.
Se fue el incentivo… y también las ventas
Como si todo esto no fuera suficiente, el Cybertruck perdió un aliado clave: el crédito fiscal federal de 7.500 dólares para vehículos eléctricos.
El beneficio, parte del “Big, Beautiful Bill” de Donald Trump, expiró el 30 de septiembre, y aunque generó un pequeño repunte de ventas justo antes de desaparecer, los analistas ya vaticinan un cuarto trimestre aún peor para Tesla.
Conclusión: ¿maquillaje o manotazo de ahogado?
Elon Musk no es precisamente conocido por rendirse fácilmente. Pero en este caso, los números cantan. Aunque el Cybertruck sigue en producción, sus ventas reales palidecen frente a las expectativas.
Y mientras las unidades se reparten entre SpaceX y xAI, parece que el verdadero viaje del Cybertruck no es por carretera, sino cuesta abajo en el terreno de la credibilidad comercial.
Te puede interesar: [Este es el secreto que usa Bill Gates para evitar lo inevitable: Procastinar]
¿Podrá Musk revertir la situación o estamos ante otro caso de promesa futurista que no pasó la prueba del presente? El próximo trimestre lo dirá.