AMD está de vuelta en la pelea con su procesador Ryzen 7000. Eso es lo que nos quedó más claro cuando la empresa aprovechó el marco de las actividades de Computex para revelar los primeros detalles oficiales en torno a este monstruo.
Durante semanas habían circulado rumores en torno a este componente de hardware que apuntaba a regresar al terreno de juego de la empresa luego del tropiezo de integración con Windows 11.
Ahora la situación luce un tanto distinta en lo que respecta al potencial porvenir de AMD. Sí, la familia de procesadores Intel está recobrando cada vez más fuerza y Apple todavía luce imparable con la dinastía iniciada con el M1.
Pero ahora AMD luce de nuevo en el terreno de competencia, y todo por el momento se lo debe a esta pieza de hardware. Aquí intentamos explicar el por qué.
Zen 4, el secreto detrás del AMR Ryzen 7000
Desde hace años el poder de cada nueva generación de procesadores reside básicamente en la astucia de su diseño y la arquitectura interna que poseen.
Para el caso de AMD y su nuevo Ryzen 7000 el factor clave de su potencia sería justamente la microarquitectura Zen 4, que promete un incremento del rendimiento en aplicaciones monohilo de más del 15%.

En donde esta pieza de hardware promete hasta 32 hilos de ejecución, llegar hasta los 16 núcleos, con PCI Express 5.0, memoria 5.0, con microarquitectura GPU RDNA 2 y todo basado en 5 nm. Un salto evolutivo importante en comparación con sus antecesores: el Ryzen 5000 y el Ryzen 3000.
Esta base de 5 nm con la integración de chiplets CCD (Core Complex Die) que incorporan los núcleos y el subsistema de memoria caché para permitir mayor eficiencia lograrían llevar el poder del Ryzen 7000 a otro nivel pero ese no es el factor de mayor peso.
La microarquitectura Zen 4 gracias a su diseño permitirá que cada núcleo tenga a su disposición una caché L2 de 1 MB. Una cifra muy por encima de los discretos 512 KB de la microarquitectura Zen 3, y que logrará una cambio importante.
No hay muchos datos concretos sobre el resto de las cualidades del procesador y se sabe que podría trabajar a más de 5 GHz sin saber con mayor precisión cómo.
Pero todo lo que han adelantado hasta ahora nos deja en claro que AMD por fin se ha integrado de lleno a esta guerra de procesadores.

