Espacio

¿3I/ATLAS tiene su propio latido? Al parecer es así y nadie sabe por qué

¿Está “vivo” el cometa 3I/ATLAS?

Loeb sostiene que las anomalías deben estudiarse y no descartarse, mientras el debate público sobre 3I/ATLAS sigue creciendo.
Loeb sostiene que las anomalías deben estudiarse y no descartarse, mientras el debate público sobre 3I/ATLAS sigue creciendo.

En el vasto silencio del espacio, un cometa parece haber encontrado su propio tempo. No tiene corazón ni sistema circulatorio, pero 3I/ATLAS está emitiendo una señal periódica tan precisa que algunos científicos ya lo llaman “el cometa con latido”. Sí, como si su núcleo marcara el paso de una canción que solo el cosmos puede escuchar.

Te puede interesar: [El nuevo hallazgo en el cometa 3I/ATLAS que tiene desconcertado a la comunidad científica: ¿Tiene erupciones volcánicas?]

El enigmático 3I/ATLAS no deja de sorprender

Desde su detección en julio de 2025, 3I/ATLAS se ha ganado el título de cometa más extraño del vecindario interestelar. Tiene una forma irregular, una composición poco común, y una velocidad que lo hace parecer más una nave espacial que un pedazo de hielo errante.

Pero ahora, un nuevo misterio se suma a la lista: un pulso luminoso perfectamente sincronizado cada 16,16 horas.


¿Estamos hablando de un fenómeno natural, o algo más? Según Avi Loeb, el conocido astrónomo de Harvard, esto bien podría ser un “latido cósmico”.

¿Qué está causando este “latido”?

De acuerdo con un estudio publicado en la revista Astronomy & Astrophysics, la fuente del pulso podría ser una gran bolsa de hielo que se encuentra en uno de los lados del núcleo del cometa.

Cada vez que esa parte gira y se orienta hacia el Sol, se activa un chorro de gas —conocido como “anticola”— que infla la coma (esa especie de nube gaseosa que rodea al cometa) y provoca un brillo repentino.

En otras palabras, cada 16,16 horas, 3I/ATLAS exhala una especie de bocanada cósmica, liberando gas y polvo como si fuera una respiración programada por el universo.

Esa frecuencia coincide exactamente con su periodo de rotación, lo que hace que el fenómeno se repita con una precisión casi mecánica.

¿Naturaleza o tecnología? El debate está abierto

Avi Loeb, que no es ajeno a teorías poco convencionales, sugiere que observar este pulso con cámaras de largo seguimiento (por ejemplo, como las del telescopio James Webb) podría revelar si el patrón tiene un origen natural o artificial.

En sus propias palabras: “Una película que muestre el brillo periódico de los chorros podría ayudar a distinguir si son naturales o tecnológicos”.

¿Estamos ante una forma exótica de criovulcanismo interestelar? ¿O podría tratarse de algo que desafía nuestra comprensión actual de los cometas?

Un cometa con personalidad... y estilo

Además de su pulsación envidiable, los datos revelan que los chorros de gas alcanzan velocidades de hasta 440 metros por segundo, algo impresionante incluso para estándares astronómicos.

Si todo esto suena sacado de una película de ciencia ficción, no es casualidad: 3I/ATLAS ya ha sido comparado con un “iceberg de metal y carbono viajando por el océano cósmico”.

Lo que viene: telescopios, teorías y mucha expectativa

Mientras los investigadores se preparan para estudiar más de cerca el misterioso ritmo de 3I/ATLAS, los fans del espacio —y de las conspiraciones cósmicas— ya tienen nuevo material para soñar despiertos.

Te puede interesar: [El cometa 3I/ATLAS podría ser más viejo que el mismo Sistema Solar, señalan algunos estudios recientes]

¿Y si el universo realmente está tratando de enviarnos señales? Por ahora, lo único claro es que este cometa no solo gira… también palpita.

       

Tags

     
.

Lo Último