En marzo de 2022, un misterioso cohete colisionó con la cara oculta de la Luna.
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La colisión generó un cráter doble de 29 metros cerca del cráter Hertzprung, y desató diversas especulaciones sobre su origen
El cohete, aparentemente sin dueño, fue vinculado inicalmente a SpaceX.
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Pero aunque los primeros análisis apuntaban a la empresa de Elon Musk, específicamente a su Falcon 9 de la misión DSCOVR (lanzada en 2015), ahora existe una nueva hipótesis de quién colisionó contra el satélite natural.
¿Quién chocó la Luna?
El enigmático cohete, conocido como WE0913A, fue detectado por el Catalina Sky Survey en 2015, desencadenando debates sobre su verdadera identidad.
A pesar de las primeras especulaciones que apuntaban a un Falcon 9 de SpaceX, los investigadores, liderados por Tanner Campbell de la Universidad de Arizona, concluyeron recientemente que el objeto pertenecería a China.
Así es: el equipo de investigación, luego de un importante análisis, concluyó que se trataría de la tercera etapa de un Long March 3C, parte de la misión Chang’e 5-T1 lanzada por China en 2014.
China detrás del problemático cohete
En el reciente estudio, los científicos compararon meticulosamente el comportamiento del brillo del objeto a lo largo del tiempo con miles de objetos espaciales hipotéticos.
Este análisis publicado en la revista Planetary Science Journal, proporcionó información clave sobre la estabilidad del cohete, revelando que tendría una configuración similar a una pesa de gimnasio con dos masas considerables en los extremos.
Esta estructura explicaría el doble cráter generado en la Luna.
Campbell sugirió además que la segunda masa, ubicada en el extremo opuesto de los motores, podría ser una estructura de soporte o un tipo de instrumentación adicional.
A pesar de este esclarecedor estudio, aún persisten incógnitas sobre la segunda masa del cohete.
Por lo pronto, esta investigación deja abiertas algunas incógnitas sobre la función exacta de la estructura adicional en el cohete chino que encontró su destino en nuestro satélite natural, pero lo importante es que propone una nueva perspectiva sobre la historia detrás de este controvertido evento lunar.