Si el siglo XX fue el del despegue hacia el espacio, el XXI espera ser el del turismo, el de los viajes a las estrellas por placer más que por sentido de investigación. Y para los científicos, el sexo es un tema a tocar.
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Durante varias décadas el sexo ha sido tabú para los astronautas. Las agencias aeroespaciales lo prohíben, tanto por:
- Motivos físicos: la falta de gravedad, la incomodidad, la ausencia de privacidad en cualquier estación espacial.
- Sociológicos: ¿cómo cambiará la interacción si han existido contactos entre tripulantes?.
- Organizativos: ninguna agencia, ni la NASA ni otra, quiere estar vinculado con los temas sexuales. El prurito se mantiene desde los inicios de la era espacial.
- Reproductivos: La posibilidad de que una astronauta quede embarazada en órbita.
Pero científicos como David Cullen consideran que es necesario abordar un debate sobre el sexo en el espacio. ¿Qué supondría para el sector una concepción humana más allá de nuestras fronteras, sobre todo con el turismo espacial?
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La necesidad del sexo en el espacio para los astronautas y los turistas
Cullen es profesor de astrobiología y biotecnología espacial de la Universidad de Cranfield, y publicó una investigación en el portal Zenodo.
“No es realista suponer que futuros turistas espaciales se abstendrán de actividades sexuales”, destaca el experto. “Lo que abre la posibilidad de que la concepción humana y las primeras etapas de la reproducción humana ocurran en el espacio”.
El objetivo de su investigación es que las agencias debatan seriamente sobre el sexo en el espacio, para prever eventos ante la nueva era de los viajes privados
Alex Layendecker, otro de los autores de la investigación, expresó: “Los aspectos sociológicos y culturales son fascinantes y dignos de considerar, dado el cambio que se avecina de astronautas privados y profesionales a ‘turistas espaciales’.
“Ese cambio encapsulará las motivaciones, las interacciones sociales y las normas de comportamiento, cuyos impactos debemos tomar en serio”, recalcó Layendecker.
Una civilización interplanetaria necesitará reproducirse
Mientras que para Egbert Edelbroek, director de SpaceBorn United, organismo que investiga la reproducción humana en el espacio, el tema va más allá del simple turismo espacial.
Si se quiere ser una civilización interplanetaria, como lo ha pregonado varias veces Elon Musk, es tiempo para discutir las posibilidades.
“Dada la importancia a largo plazo de la reproducción humana más allá de la Tierra, ya que la humanidad está tratando de convertirse en una especie multiplanetaria, necesitamos que se tome en serio el posible primer paso, ya sea que esté planeado, o especialmente si no lo está”.