Marte es uno de los objetivos de la NASA a mediano y largo plazo. Pero para la colonización del planeta rojo hay que luchar contra varios factores, uno de ellos la radiación.
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El planeta vecino de la Tierra tiene casi tres veces más radiación que la de la Estación Espacial Internacional.
Para determinar esto, se realizó a mediados de la década pasada el llamado Experimento del entorno de radiación de Marte (Marie), con la sonda Mars Odyssey.
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De acuerdo con esta investigación del Jet Propulsion Laboratory de la NASA, al no contar con un campo magnético global y tener poca atmósfera, la superficie de Marte es bombardeada por dos tipos de radiación primaria.
Son las erupciones solares y los rayos cósmicos galácticos.
Las primeras son ráfagas de protones de baja energía del Sol; que se presentan de manera intermitente y son relativamente fáciles de enfrentar.
Pero las segundas, los rayos cósmicos galácticos, son núcleos atómicos extrasolares de alta energía que dañan el ADN. Estos son continuos y no se pueden proteger contra ellos, por lo que es necesario determinar la dosis que recibiría un astronauta antes de cualquier exploración humana.
¿Cuáles son los planes de NASA para enfrentar, sobre todo, los rayos cósmicos galácticos que afectan a Marte?
Los planes de NASA para proteger a sus astronautas de la radiación en Marte
Un estudio publicado por investigadores en el Journal of Geophysical Research: Planets, señala que será necesario excavar en el interior del planeta para sobrevivir en él.
“Excavar profundamente en la superficie de Marte podría ofrecer protección contra la radiación dañina y, potencialmente, proporcionar materiales de construcción para futuros astronautas”, afirman los científicos, liderados por Jian Zhang, Jingnan Guo y Mikhail Dobynde.
Comprender cómo el material marciano se ve afectado por los rayos cósmicos galácticos y el papel de la atmósfera de Marte en la alteración de la exposición a la radiación son claves para las futuras exploraciones.
“Durante mucho tiempo se ha argumentado que los astronautas podrían hacer uso de estructuras geológicas naturales, como tragaluces de cuevas o tubos de lava como refugios contra la radiación en Marte”, escribieron los autores del estudio, citados por el portal Space.
“Nuestro estudio puede servir para mitigar los riesgos de radiación al diseñar futuros hábitats marcianos utilizando material de superficie natural como protección de blindaje”.
Trajes especiales para vivir en Marte
Pero no es solo vivir bajo la superficie del planeta rojo, sino también contar con material adecuado de protección. Aquí entra en juego el chaleco AstroRad.
Creado por la empresa StemRad, está hecho de un material polimérico rico en hidrógeno, cubriendo la pelvis y el torso, donde se encuentran los órganos más vulnerables a la radiación.
“En lugar de un enfoque de todo o nada”, indica la compañía en el portal Digital Trends, “la protección selectiva puede equilibrar la eficacia y la practicidad. Si puede proteger algunos de los órganos más vulnerables, como los pulmones o el tejido mamario, puede ayudar a mantener a las personas seguras sin sobrecargarlas”.