:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/3K43PDFSKNDILDSH2ZCNLEKDCA.jpg)
No hay registros oficiales de ninguna agencia espacial en la Tierra sobre vida humana o extraterrestre en Marte. Sin embargo, Boriska Kipriyanovich asegura ser la prueba viviente.
Boriska es en la actualidad un adulto joven de 26 años. Nació en 1996 y fue el protagonista de la historia del niño “extraterrestre”, que cuando era niño aseguró que reencarnó en nuestro planeta luego de vivir en el planeta rojo.
No sabemos si la vida hipotética de este humano en Marte haya sido en una quinta, con un lindo jardín y parrillera, pero no deja de ser interesante que, en 2007, Boriska haya revelado con 11 años que venía de Marte.
Él y otros más
El sitio web de Cultura Colectiva citó varias entrevistas que dio en su momento Boriska Kipriyanovich, quien se identificó como un “pequeño índigo”.
El niño de origen ruso aseguró que no era el único de su tipo en la Tierra. Según él, habían más extraterrestres en nuestro planeta ocultando su identidad.
:quality(70)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/metroworldnews/KXUP3ORBRBDR7E7QITYKHJLDJQ.jpg)
Por si fuera poco, el niño extraterrestre contó que en el espacio era piloto de una nave y que fue parte de varias misiones a un continente desaparecido llamado Lemuria. Tras una guerra nuclear en Marte, tuve que reencarnar en un humano de la Tierra.
Sobre si alguna vez mostró diferencias con otros niños, su madre contó que Boriska, desde los dos años, mostró una inteligencia extraordinaria. Sabía muchas cosas sobre los planetas y el universo. En las entrevistas mostró conocimientos sobre civilizaciones antiguas y predijo diferentes sucesos.
“La vida humana cambiará cuando se abra la Esfinge, tiene un mecanismo de apertura en algún lugar detrás de la oreja”, dijo Boriska a The Sun.
El niño “extraterrestre” en la actualidad
Boriska Kipriyanovich tiene actualmente 26 años. Pasó mucho tiempo en la clandestinidad, hasta que empezaron a viralizarse fotos suyas de adulto en las redes sociales.
Algunas teorías aseguran que el gobierno de Rusia lo mantiene escondido en un lugar remoto bajo su protección, mientras que otros informes creen que vive en Moscú, pero con otra identidad.
