Pocos lo conocen, pero el róver Perseverance de la NASA tiene un aparato llamado Moxie que está haciendo las veces de un árbol, produciendo seis gramos de oxígeno respirable por hora, que equivalen a 100 minutos de aire sobre la superficie de Marte.
Un estudio publicado por la revista Science recuerda que este es un paso importante para Percy, como llaman al róver, ya que la superficie marciana es rica en dióxido de carbono.
Moxie es un dispositivo del tamaño de un maletín, que por más de un año ha demostrado en siete ocasiones y en las diferentes estaciones que puede desarrollar el mismo trabajo que un árbol pequeño, una revelación tomando en cuenta que la densidad de la atmósfera del planeta rojo varía más que en la Tierra.
Para crear oxígeno, la máquina atrae el aire a través de un filtro que lo limpia de contaminantes, tras lo que se presuriza y se envía a través del electrolizador de óxido sólido, que divide electroquímicamente el aire rico en dióxido de carbono en iones de oxígeno y monóxido de carbono.
Los iones de oxígeno se aíslan y se recombinan para formar oxígeno molecular respirable (O2), cuya cantidad y pureza es medida por Moxie antes de devolverlo al aire, junto con el monóxido de carbono y otros gases atmosféricos.
Michael Hecht, autor principal del estudio, explicó: “(Moxie) también ha funcionado a diversas horas del día, excepto al amanecer y anochecer cuando la temperatura cambia sustancialmente”.

Próximo plan: una versión mejorada de Moxie
Los investigadores creen que la NASA podría enviar a Marte una versión mejorada de Moxie antes de una misión humana, que podría producir oxígeno a un ritmo de cientos de árboles. Como añade DW, esto permitiría tener suficiente oxígeno para mantener a los tripulantes y alimentar un cohete de regreso la Tierra.
La versión actual es pequeña y fue hecha para que quepa a bordo del Perseverance. Está construida para funcionar durante periodos cortos, arrancando y apagando con cada recorrido.
Los ingenieros planean ampliar su capacidad y aumentar su producción, especialmente en la próxima primavera marciana, cuando la densidad atmosférica y los niveles de dióxido de carbono son altos.
