El helicóptero Ingenuity, de la NASA, encontró “restos de otro mundo” en Marte… claro, son escombros dejados por la misión Perseverance al momento de llegar al planeta rojo en 2021.
Es un componente de carcasa trasera y el paracaídas que se desprendieron durante el arribo del rover, en febrero del año pasado. Ese “otro mundo”, por lo tanto, es la Tierra.
Con el rover Perseverance llegó también el helicóptero Ingenuity, que se está encargando de analizar, vía aérea, la superficie del planeta rojo.
El objetivo principal de la misión Perseverance en Marte es la astrobiología, incluyendo la búsqueda de signos de vida microbiana antigua. El rover analizará la geología del planeta y el clima pasado, abriendo camino para la exploración humana del planeta rojo.
Será, además, la primera misión en recolectar y almacenar rocas y regolito marcianos (roca rota y polvo).
Ian Clark, ingeniero que trabajó en el sistema de paracaídas de Perseverance, afirmó, en un comunicado de la NASA: “Definitivamente tiene un elemento de ciencia ficción. Parece algo de otro mundo, ¿no es así?”.
“Dicen que una imagen vale más que mil palabras, pero también vale una cantidad infinita de conocimientos de ingeniería”, subrayó Clark, que en la actualidad es líder de la fase de ascenso de Mars Sample Return.
Así cayeron los restos “de otro mundo” en la superficie de Marte
El paracaídas y la carcasa trasera de Perseverance se separaron del rover a una altitud de casi dos kilómetros. Como recuerda el New York Times, un sistema propulsado por cohetes, llamado Skycrane, llevó al vehículo el resto de la ruta hacia la superficie.
Tanto el paracaídas como la carcasa cayeron a más de 1.6 kilómetros hacia el noroeste.
La carcasa, que mide 4.5 metros, golpeó el suelo a unos 125 kilómetros por hora, rompiéndose parcialmente. En líneas generales, parece estar en buen estado. Mientras que el paracaídas luce intacto.

“Para obtener las tomas que necesitábamos, Ingenuity hizo muchas maniobras, pero teníamos confianza porque hubo maniobras complicadas en los vuelos 10, 12 y 13″, señaló Havard Grip, piloto jefe de Ingenuity en el Jet Lab de la NASA. “Nuestro lugar de aterrizaje nos preparó muy bien para obtener imágenes de un área de interés para el equipo científico de Perseverance en el vuelo 27, cerca de la cresta Séítah”.
El helicóptero Ingenuity fue construido por el Jet Lab de la NASA, con el apoyo de la Dirección de Misiones Científicas de la agencia aeroespacial. También ayudaron el Centro de Investigación Ames y el Langley, junto con un grupo de compañías privadas norteamericanas como AeroVironment, Qualcomm y SolAero.
