Desde hace décadas, Goku ha sido el rostro de Dragon Ball. Pero a estas alturas del anime y el manga, cada vez hay más fans que piensan lo mismo: el verdadero protagonista debería ser Vegeta. No sólo por su evolución brutal, sino porque, seamos honestos, su historia es mil veces más interesante que la de Kakarotto.
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¡Y hasta Toriyama y su ex editor han estado de acuerdo!
1. Vegeta sí aprende de sus errores
Mientras Goku sigue cayendo en los mismos errores (hola, dejar vivir al villano que destruirá la Tierra), Vegeta ha demostrado que sabe crecer como persona y como guerrero. Lo vimos contra Majin Buu, lo vimos contra Toppo. Aprende, ajusta y mejora.
2. Es el personaje que más ha evolucionado
De villano genocida a protector de Namekusei. Su viaje emocional es uno de los más ricos del anime. Goku sigue siendo el mismo chico ingenuo de siempre. Vegeta ha madurado.
3. Nació con más potencial que Goku
Vegeta es un Saiyajin Élite, y aunque al principio era arrogante, ahora trabaja tan duro como Goku. Y a veces, incluso más.
4. Es un personaje mucho más complejo
El orgullo, la redención, el amor por su familia... Vegeta es como una cebolla: tiene capas. Y cada una es más interesante que la anterior.
5. Es mejor padre y esposo
Goku desaparece por semanas. Vegeta se queda al lado de Bulma para el nacimiento de su hija y protege a su familia con uñas y dientes. ¡Hasta enfrentó a un dios por su esposa!
6. Es un mentor nato
La relación con Cabba nos mostró un lado líder de Vegeta. No es solo un luchador, también es un guía para la nueva generación.
7. No necesita que la trama lo salve
Goku recibe transformaciones “porque sí”. Vegeta se gana cada nuevo poder a pulso, entrenando solo y sufriendo cada paso.
8. Es mejor técnicamente en combate
En igualdad de condiciones, Vegeta le ha ganado a Goku. Su técnica, resistencia y lectura de batalla lo colocan un paso adelante.
9. Forja su propio camino
Mientras Goku persigue el Ultra Instinto, Vegeta elige el Ultra Ego. No quiere copiar a nadie. Quiere ser él mismo, a su manera.
10. Es simplemente más emocionante de ver
Vegeta es impredecible, intenso y emocional. Puede terminar una pelea en segundos si hace falta. Tiene pasados oscuros y decisiones arriesgadas. Eso lo hace un protagonista perfecto.
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Conclusión: Dragon Ball necesita un refresco, y el nombre es Vegeta. No solo porque se lo merece, sino porque ya ha demostrado ser mucho más que un “segundo lugar”. Es hora de que el príncipe tome su trono.