Después de años adaptando múltiples arcos en tiempo récord, Dragon Ball Super podría mejorar su ritmo y calidad concentrando la saga de Moro en tres películas. Dividir este vasto conflicto en actos cinematográficos daría a los animadores el espacio para pulir cada batalla y a los fans, la emoción de un estreno por entrega.
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1. Inicio explosivo: Moro irrumpe y Merus aparece
La primera entrega arrancaría con el encuentro inicial de Goku y Vegeta con el peligroso Moro, recogiendo directamente desde el final del Torneo de Poder.
Aquí veríamos a la Patrulla Galáctica y al Gran Kaio-sama despertando “al Señor de los Señores” dentro de Buu, hasta culminar con la dramática derrota de los héroes y el primer deseo de Moro en las Esferas del Dragón. Ese clímax, con Vegeta alejándose rumbo a Yardrat, dejaría a la audiencia al borde de la butaca.
2. La gran defensa: guerreros de antaño al rescate
En la segunda película, los Guerreros Z clásicos —Yamcha, Krilin, Gohan, Piccolo y demás— vuelven del retiro para enfrentarse a los prisioneros fugados de Moro. Mientras, Goku domina el Ultra Instinto y Vegeta entrena en Yardrat.
El filme alcanzaría su cénit con el primer choque entre UI Goku y Moro, justo en el momento en que Vegeta irrumpe con su teletransporte. Un final perfecto para dejar claro que la batalla está lejos de terminar.
3. El desenlace definitivo: Morir o vencer
La tercera parte bajaría la adrenalina con la épica confrontación final. Con Moro absorbiendo poderes via “Copia” y alcanzando un nuevo nivel de amenaza, Goku y Vegeta unen fuerzas para un combate titánico que recuerda a los clásicos enfrentamientos contra Cell o Majin Buu.
El cierre podría coronar a ambos Saiyan como guardianes galácticos honorarios o, si se quiere, mostrar el aviso de Granolah preparando la siguiente gran saga.
Ventajas de un formato cinematográfico
- Calidad frente a rapidez: las películas permiten años de desarrollo por arco, evitando la animación inconsistente del anime original.
- Emoción por entrega: festivales en sala y expectativas renovadas que mantienen la chispa viva entre película y película.
- Adaptación fiel y detallada: cada momento clave recibe el tiempo que merece, desde la estrategia de la Patrulla Galáctica hasta el crecimiento interior de Vegeta.
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Siguiendo ejemplos como Mugen Train en Demon Slayer o los especiales extendidos de Ataque a los Titanes, Dragon Ball Super daría un paso más allá, regalando a los fans una experiencia cinematográfica capaz de redimir la saga y sentar las bases de un regreso triunfal al anime.
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