Las aventuras de Dragon Ball terminaron en 1995, después de la brutal batalla entre Goku, Vegeta y Majin Buu. Akira Toriyama ya tenía dos arcos queriendo terminar con su serie más exitosa, y los ejecutivos lo seguían convenciendo de seguir, hasta que en este punto decidió finalizar por completo las aventuras de Goku y el resto de los Guerreros Z.
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Así nacieron series como Dragon Ball GT, que en el afán de seguir lucrando con la obra de Akira Toriyama, intentaron darle continuidad a las aventuras sin mucho éxito. Sin embargo, esta parte de la serie contaba con los permisos y autorización del mangaka japonés, que simplemente dijo que no quería seguir participando.
En Indonesia hicieron algo similar con una versión de manga, pero sin derechos o autorización alguna. La editorial Rajawali Grafiti, encargada de publicar el manga, se armó su propio equipo de ilustradores y lanzó lo que ellos llamaron Dragon Ball 2.
Era una suerte de continuación de Dragon Ball sin los derechos. Es como cuando en el FIFA (ahora EAFC) hay un equipo con el que no llegaron a acuerdos de autorización y le ponen un nombre similar, con los mismos colores.
Las imágenes, cortesía de un hallazgo de Sensa Cine, nos muestran como siguieron las aventuras con ilustraciones de Uub, Vegeta, Goku y lo que creemos que es Gohan, vestidos con armaduras del Ejército de Freezer, y todos con el mismo tamaño.
En otra de las páginas que aparecieron en Internet, aparece Kaio Sama, una versión de Milk, lo que parece un Broly y un villano que se hace llamar Monster Dr. Capuchón. Todo esto que les estamos contando es real, la imagen que les compartimos abajo lo demuestra.
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En Rajawali Grafiti lo que hicieron básicamente fue su propio Dragon Ball GT, pero sin permiso. Al igual que el mundo entero, en esta editorial se negaron a perder la serie de Akira Toriyama, que en ese momento era lo más exitoso del momento. No tuvieron mucho éxito, pero era necesario intentarlo.
