Sucedió por fin: compraste una Nintendo Switch luego de darle muchas vueltas a todo lo que implicaba. Se trata de una consola con sus propias peculiaridades y que exige tal vez hacer algunas modificaciones a nuestros hábitos de entretenimiento al ser portátil.
La compañía japonesa se mueve a su propio ritmo y siguiendo sus reglas. De modo que no tenemos el mayor poderío gráfico, ni muchos títulos multiplataforma AAA y las ofertas de títulos que los ponen a un precio más accesible son relativamente pocas a diferencia de PC, Xbox o la PlayStation.
Pero aun así la Nintendo Switch tiene ventajas irrebatibles que la vuelven muy atractiva y que constituye una inversión más que justificada a corto y largo plazo para la gran mayoría.
Su catálogo de juegos exclusivos, con franquicias como Super Mario Bros., The Legend of Zelda o Pokémon son argumentos más que suficientes para aventurarse a utilizar este sistema portátil.
Pero al momento de abrir el paquete de la consola y comenzar a usar sus componentes lo más probable es que casi de inmediato haya surgido la duda sobre qué tan buena idea sería dejar la pantalla siempre conectada al Dock.
Hoy responderemos a esta duda, pero vamos por partes.
Qué es el Dock de la Nintendo Switch
En sentido estricto el Dock de la Switch es la base que permite al usuario proyectar los juegos en la pantalla de TV. Se necesita un adaptador de CA y un cable HDMI para una configuración completa y básicamente convierte la consola portátil en una tradicional.
¿Es buena idea dejar conectada la Nintendo Switch al Dock todo el tiempo?
Al conectar tu consola al Dock empieza a cargarse la batería para tenerla lo más llena posible para nuestras sesiones en la calle. Tal situación es factor de preocupación para muchos ya que se tiene la idea de que la vida útil y autonomía del aparato podría verse afectada.
Los ciclos de carga de absolutamente toda batería son limitados y tarde o temprano este componente cederá y dejará de funcionar, presentando un deterioro progresivo en sus periodos de autonomía antes de necesitar nuevamente cargarse.
Pero si dejas tu Switch en el dock por largos períodos de tiempo, no es necesario entrar en pánico. Nintendo ha declarado directamente de manera oficial que la batería del sistema no se degradará ni sufrirá daños incluso cuando la consola permanezca conectada después de superar el 100% de carga.
Al final si conectamos la Switch mientras queda algo de energía contaría como un ciclo parcial de carga y no uno completo.
En resumen: la consola jamás tendrá una batería eterna. Pero dejarla conectada al Dock no disminuirá más de lo natural su vida útil.