El Universo Cinematográfico de Marvel nos muestra a un Thanos superpoderoso que logra someter a Loki y a Thor, en su búsqueda de las gemas del infinito. Incluso la brutal ira destructiva de Hulk no es capaz de detener al titán loco mientras intenta alcanzar su objetivo.
¿Cuál es su finalidad? Un genocidio a escalas masivas que elimine a la mitad de la población de todo el universo. Thanos dice que esto es tan solo un pequeño precio a pagar por la salvación (a small price to pay for salvation). Explica que los recursos son finitos y con la sobrepoblación en cada mundo estamos encaminados hacia la extinción como raza.
Los cómics explican que esto es cierto, en una de las tantas realidades en las que existe Thanos. Pero esto se basa en una en la que el titán loco busca impresionar a Lady Muerte, porque la ama, y quiere exterminar a toda la población del universo, no sólo a la mitad.
Nunca lo logra gracias a la existencia de los Avengers. Sin embargo, en una versión de los cómics, hay alguien que sí lo alcanza.
Se trata de Loki, en el número 65 de Los Vengadores, la serie de Jason Aaron y Javier Garrón. De acuerdo con lo que reseña Hobby Consolas, esta historieta muestra como Asgard es gobernado por el Dios del Engaño, debido a que Thor falleció a manos de su propio hermano al no tener el control del Mjolnir.
Loki se da cuenta que él es el motivo por el que se forman los Vengadores y por eso siempre está destinado a la derrota. Entonces, encontró la manera de que esta agrupación nunca naciera en su realidad. Otros villanos como Galactus y el mismo Thanos lo enfrentaron y perdieron; Loki tenía un nivel de magia superlativo e imposible de ser neutralizado.
Estas acciones del uso desmedido de la magia lo llevaron a pagar una consecuencia: sacrificar la vida del universo entero, lo que siempre quiso Thanos para sorprender a Lady Muerte.
