La pandemia que generó el covid-19 se instaló en América Latina durante el primer trimestre del 2020. Desde entonces, la vida no ha vuelto a ser la misma. Y probablemente no lo vuelva a ser.
Las cifras de muertos son desgarradoras y la vacunación, aunque en algunos países lleva buen ritmo, la realidad es que va muy lenta. A eso hay que sumarle la llegada de una nueva variante mucho más contagiosa que nos aleja de liberarnos algún día de las mascarillas.
Y aunque los expertos en números son capaces de cuantificar las pérdidas humanas, números de contagios y debacle económica mundial, hay algo que todavía no se conoce. Se trata de las consecuencias a futuro que deja el contagio del covid-19.
¿Tiene secuelas? ¿Deja alguna afección o la puerta abierta a futuras enfermedades? Nadie lo sabe con certeza. Sin embargo, hay estudios que se encargan de analizar cada órgano del cuerpo después que se superó una infección de coronavirus.
De esta manera el portal Slash Gear reseña un estudio que se publica en The Lancet. El mismo, sin intención de alarmar a la población, encuentra que después que se supera el contagio por coronavirus, el cerebro sufre déficits cognitivos. Dicha afirmación se basa en las notorias evidencias de personas que han demostrado haber quedado con problemas neurológicos, cardiacos o la simple pérdida de olfato y gusto, que es una función que ejecuta la masa pensante.
Los datos de este estudio del covid-19
Las funciones cognitivas son aquellas en las que el cerebro se encarga de procesar y recordar información. Gracias a la presencia de este proceso, la mente permite que prestemos atención, percibamos algo, simplemente nos acordemos (memoria) o el lenguaje para comunicarnos. Es una función ligada a la inteligencia o la racionalidad. Entonces, en este departamento es que se mostraron fallas, según el informe.
