Que los taxistas no quieren a Uber no es una novedad y aún cuando el gobierno de Chile está haciendo lo posible por regularizar la situación de la empresa con un proyecto de «Ley Uber», el gremio de taxis sigue disconforme.
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Por eso, hoy 30 de julio habrá un par de taxistas y además, estos pedirán que el proyecto del gobierno sea declarado inadmisible. Hablando con Radio Cooperativa, el presidente de la Confederación Nacional de Taxis de Chile, Luis Reyes, explicó que según ellos el proyecto fue muy «improvisado» y que tampoco les preguntaron a ellos sobre el mismo.
«Nos complica que el proyecto sea de tipo Ley Corta, porque eso significa que en dos o tres años más vamos a estar a la deriva con toda esta informalidad que está pasando», indicó Reyes. «Además, todo el trabajo del proyecto anterior, que duró varios años, se dejó de lado».
El gobierno no ha entendido que esto crea un problema social. Por ley, tenemos una antigüedad de 12 años para prestar el servicio y renovamos los vehículos cada 6 o 7 años, con todo lo que eso significa para un taxista. Nuestro gremio aporta 500 millones de dólares al año en impuestos específicos a las bencinas. Y nosotros, a cambio, obtenemos cero.
Anteriormente en CNN, Osvaldo González de Confenataxi también hizo descargos similares, aduciendo que el proyecto de ley en su formato actual era discriminatorio contra los taxistas.
Entre otras cosas, el nuevo proyecto de ley Uber le pedirá a los conductores tener la licencia A1 de carácter profesional y seguros de responsabilidad civil para proteger a los pasajeros que usen el servicio.