El primer ministro de Islandia, Sigmundur David Gunnlaugsson, dimitirá de su cargo como respuesta a las protestas generadas en torno a las revelaciones mostradas en los Papeles de Panamá que relacionan tanto a él como a su esposa en la copropiedad de la empresa offshore Wintris.
Tan solo el día de ayer Gunnlaugsson aseguró que no iba a renunciar a pesar de el tremendo conflicto de interés que suponía la vinculación de bonos de Wintris con tres bancos islandeses que desaparecieron tras la crisis del 2008.”No he considerado renunciar por este tema y no voy a renunciar por este tema. El gobierno ha tenido buenos resultados. El progreso ha sido fuerte y es importante que el gobierno pueda terminar este trabajo”, comentó ayer a miembros del Parlamento Islandés.
Gunnlaugsson dimitirá de su cargo en medio de protestas de cientos de ciudadanos que se dieron cita en la capital Reikiavik frente al Parlamento para exigir su renuncia.
Una entrevista realizada a finales de marzo mostró la reacción del primer ministro al ser cuestionado por la copropiedad de la compañía Wintris.
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