La placa base o madre, conocida como la pieza central donde se conectan componentes como el procesador, tarjeta gráfica, memoria RAM, unidad de almacenamiento y otros, incluye una BIOS que verifica el estado de estos elementos.
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Si se detecta algún error, la placa emite una serie de pitidos que proporcionan indicaciones sobre el problema.
Cuando se ensambla un ordenador, la placa base incorpora un altavoz piezoeléctrico, recordado por los veteranos por ser el único dispositivo de sonido en los antiguos PC de los años 80.
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En la actualidad, este altavoz emite señales sonoras en caso de fallos, pero algunas placas modernas también cuentan con displays que muestran códigos para identificar los problemas.
La emisión de estos pitidos tiene el propósito de ayudar a usuarios y técnicos a diagnosticar fallos en ausencia del sistema operativo o acceso a la BIOS. No hay un estándar universal para estos pitidos, ya que cada fabricante de placa base tiene su propio conjunto de códigos para indicar los componentes defectuosos.
La mayoría de los fabricantes, como ASUS, GIGABYTE, ASRock, EVGA, MSI y otros, tienen sus propias secuencias de pitidos que apuntan a problemas específicos en componentes como la CPU, memoria RAM, tarjeta gráfica y más.
Estos códigos pueden variar significativamente entre marcas y modelos.
Por ejemplo, ASUS tiene una serie de pitidos para indicar problemas en la CPU, memoria RAM o tarjeta gráfica, mientras que GIGABYTE tiene una lista que incluye errores en la CMOS, memoria RAM, tarjeta gráfica y más.
ASRock se caracteriza por emitir pitidos cortos que representan errores específicos en la RAM, procesador, tarjeta gráfica, entre otros.
Incluso los fabricantes más reconocidos, como Apple, tienen sus propias señales sonoras, aunque en sus placas base las melodías pueden ser diferentes y pueden indicar errores específicos, aunque esta compañía tiende a utilizar menos los pitidos como método de diagnóstico.
Antiguamente, se solían seguir estándares como los de American Megatrends o AWARD para interpretar los pitidos en BIOS más antiguas, aunque con la personalización actual de los fabricantes, estos estándares han quedado obsoletos.
En resumen, los pitidos de la placa base son una herramienta valiosa para diagnosticar rápidamente problemas de hardware, pero es crucial tener en cuenta que los códigos pueden variar significativamente según el fabricante y el modelo de la placa base.