Lo que para millones de niños en el mundo es un universo colorido de juegos, creatividad y amigos virtuales, en Rusia se ha convertido en el nuevo enemigo digital del Estado. Esta semana, el regulador de comunicaciones del país, Roskomnadzor, anunció el bloqueo total de Roblox, una de las plataformas de videojuegos más populares del planeta.
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Con más de 151 millones de usuarios activos diarios y una economía interna digna de una ciudad futurista, Roblox se ha ganado un lugar privilegiado en la vida digital de los más jóvenes. Pero, en Rusia, eso ya no será posible.
Según el gobierno, la plataforma está “plagada de contenido inapropiado” que podría tener un impacto negativo en el desarrollo espiritual y moral de los niños.
¿Qué acusa exactamente Rusia?
La justificación oficial fue contundente: “difusión de material extremista y propaganda LGBT”. De acuerdo con Roskomnadzor, el contenido alojado en Roblox infringe varias leyes rusas que prohíben la promoción de relaciones sexuales “no tradicionales” y contenidos considerados dañinos para menores.
Y esta no es la primera vez que Rusia va tras plataformas extranjeras.Ya ha bloqueado medios, redes sociales y apps que no se alinean con sus políticas internas, especialmente aquellas que, según su visión, promueven valores occidentales contrarios a la cultura rusa.
La respuesta de Roblox
Desde la empresa estadounidense no tardaron en reaccionar.Un vocero señaló a Reuters que “Roblox respeta las leyes locales de los países donde opera” y que su misión es ofrecer un espacio seguro y positivo para aprender, crear y conectarse.
También remarcaron que cuentan con sólidas medidas proactivas para prevenir contenido dañino, aunque dejaron claro que cada país interpreta la “seguridad” a su manera.
No es la primera vez que Roblox enfrenta bloqueos
Rusia no está sola en su cruzada contra Roblox. Países como Irak y Turquía también han prohibido el acceso a la plataforma, principalmente por preocupaciones relacionadas con depredadores sexuales y falta de control sobre ciertos espacios del juego.
Pero en el caso ruso, el contexto político es más amplio. El país ha intensificado su represión digital en los últimos años, incluyendo medidas contra servicios como WhatsApp, Telegram y Duolingo, este último por mencionar relaciones LGBT en sus lecciones.
¿Qué sigue para la comunidad rusa?
Por ahora, millones de jóvenes en Rusia deberán decirle adiós a sus mundos virtuales en Roblox. Y aunque aún queda por ver si la medida será permanente o si habrá negociaciones entre ambas partes, la decisión refleja claramente el endurecimiento del control estatal sobre la vida digital en el país.
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Roblox se suma así a la creciente lista de plataformas vetadas en Rusia, en una tendencia que parece ir más allá de la protección infantil, tocando fibras políticas, ideológicas y culturales.