Tres años después de la explosión de ChatGPT, Europa busca dejar de depender de EE. UU. y China en el desarrollo de IA. Países como España y Alemania están liderando la creación de Grandes Modelos de Lenguaje (LLM) propios para garantizar que la tecnología se alinee con los valores democráticos y la estricta normativa RGPD.
El concepto de “IA Soberana” se refiere a la capacidad de un país o región para desarrollar, controlar e implementar tecnologías de Inteligencia Artificial sin depender de proveedores externos. En Europa, esta se ha convertido en una prioridad estratégica por varias razones.
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Una de ellas, el riesgo geopolítico. La dependencia de sistemas de IA (y su infraestructura, como chips y cloud) provenientes de EE. UU. (Silicon Valley) o China genera vulnerabilidad ante conflictos o bloqueos comerciales, impactando la resiliencia tecnológica europea.
La IA soberana busca asegurar que los modelos se entrenen con datos locales y cumplan rigurosamente con el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) de la UE. Esto garantiza que la tecnología respete los derechos fundamentales y los valores democráticos, un pilar fundamental en la Ley de IA de la UE (AI Act).También, Europa busca recuperar su ventaja tecnológica e impulsar el desarrollo económico local, creando sus propias soluciones para competir en el mercado global.
Proyectos nacionales: España, Alemania y el impulso a los LLM Locales
Si bien la Comisión Europea ha invertido en iniciativas como el superordenador EuroHPC, son los gobiernos nacionales los que están tomando la iniciativa en la construcción de Grandes Modelos de Lenguaje (LLM) propios, libres de la influencia de los gigantes tecnológicos.
El gobierno español, a través de la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial (ENIA), apoya la investigación aplicada y la digitalización con IA. Adicionalmente, se ha puesto en marcha el desarrollo de un LLM entrenado con una base de datos inicial masiva en catalán (más de 1.7 millones de palabras), buscando modelos que representen la riqueza lingüística regional.
En el caso de Alemania, universidades como la Universidad Técnica de Darmstadt (TU Darmstadt) están involucradas en proyectos clave, como SOOFI, que buscan crear experiencia en todas las áreas del desarrollo de IA, desde la preparación de datos hasta la construcción y el despliegue de modelos a gran escala.
La meta: Una cadena de valor controlada
Lograr la soberanía en IA va más allá de construir un modelo; implica dominar toda la cadena de valor digital, desde la infraestructura cloud y los chips hasta los modelos y las aplicaciones finales.
Para reducir la dependencia, Europa fomenta alianzas estratégicas, como la de NVIDIA con Mistral IA, para potenciar la capacidad de supercomputación de inteligencia artificial a nivel local. Esto permite a investigadores y empresas europeas entrenar modelos sin enviar datos sensibles a servidores extranjeros, alineándose así con el objetivo de autonomía digital de la UE.
La conclusión es que la IA soberana ya no es una opción, sino un aspecto esencial para la resiliencia tecnológica, la seguridad de los datos sensibles (especialmente en sectores como la defensa y la sanidad) y la capacidad de Europa para autogobernarse en la era digital.