Mercedes-Benz, una de las marcas que más ha impulsado la fiebre por las pantallas táctiles gigantes en el interior de sus vehículos (llegando a la Hyperscreen de 39,1 pulgadas), ha dado un paso estratégico hacia atrás. La compañía alemana reconoció públicamente que los botones físicos son superiores a las superficies táctiles para la conducción, una rectificación impulsada por datos concretos de seguridad y usabilidad.
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El giro fue confirmado por Magnus Östberg, jefe de software de Mercedes-Benz, quien declaró que la telemetría recogida de sus propios vehículos definidos por software (SDV) demostró una conclusión contundente: las funcionalidades de uso frecuente se gestionan mejor y de forma más segura con mandos físicos.
La seguridad gana la batalla al diseño minimalista
Durante años, la tendencia en la industria automotriz fue imitar a Tesla, eliminando casi todos los mandos físicos para lograr un diseño minimalista y ahorrar costos de producción. Sin embargo, este enfoque ha tenido un coste innegable en la seguridad vial.
- Menos Distracción: Para ajustar funciones básicas como la climatización, el volumen o los modos de conducción en una pantalla táctil, el conductor debe apartar la vista de la carretera y fijarla en la interfaz. El botón físico, en cambio, permite la interacción mediante el tacto (retroalimentación háptica), sin necesidad de desviar la atención. Es un riesgo de seguridad que, en la práctica, es palpable y en el que ahora se centran los esfuerzos de la marca.
- Presión Regulatoria: La decisión de Mercedes-Benz también responde a una presión creciente por parte de organismos de seguridad. Euro NCAP advirtió que, a partir de enero de 2026, podría reducir la máxima calificación de seguridad de cinco estrellas a los fabricantes que eliminen controles físicos esenciales. Esta exigencia aplica a tareas básicas como activar los intermitentes, el claxon, los limpiaparabrisas y la función eCall SOS (Motorpasión).
Cabe destacar que uno de los que comenzó con esta tendencia fue Tesla: absolutamente minimalista y solo una gran pantalla:
La vuelta al tacto en el volante
La reintroducción de los mandos tradicionales comenzará a verse en los próximos estrenos de la marca, como el GLC eléctrico y el CLA Shooting Brake. Estos modelos incluirán volantes de nuevo diseño con botones físicos, rodillos y balancines para comandos esenciales, buscando un equilibrio entre el control analógico para las funciones críticas y la tecnología digital para las funciones secundarias.
Este giro de Mercedes-Benz confirma una tendencia de mercado: si bien la tecnología digital sigue siendo vital, la usabilidad y la seguridad exigen que los controles que afectan a la conducción inmediata sean tangibles.