Internet

Según un estudio, con este sencillo truco puedes lograr lo que siempre quisiste: Comunicarte con tu gato

Si tú y tu amigo felino no se llevan bien, quizá no estén hablando su idioma.

Gato Pequeño - Imagen de Grok IA de X
Gato Pequeño - Imagen de Grok IA de X Segúna un estudio, con este sencillo truco puedes lograr lo que siempre quisiste: Comunicarte con tu gato

Los gatos tienen fama de ser independientes, misteriosos y, en muchos casos, expertos en ignorarnos olímpicamente. Pero, ¿y si el problema no fuera tu gato sino tú? Tranquilo, no es que seas una mala persona, pero puede que simplemente no estés “hablando” en su idioma. La buena noticia es que la ciencia ha encontrado una manera sorprendentemente simple de ganarte su cariño: parpadear lentamente.

PUBLICIDAD

Te puede interesar: [¿Por qué 2025 podría ser el año decisivo para el metaverso?]

No, no es una broma. Un estudio ha demostrado que si le haces ojitos a tu gato—pero en modo cámara lenta—es más probable que te vea como alguien digno de su atención y no solo como el humano que le llena el plato de comida.

El truco felino que estabas buscando

Los que tienen gatos probablemente hayan notado que, de vez en cuando, su michi les lanza una mirada relajada, con los ojos entrecerrados y un parpadeo lento. No es que tenga sueño ni que te esté juzgando (bueno, tal vez un poco), sino que en el lenguaje de los gatos, esto es su versión de una sonrisa.

Aquí es donde entra la ciencia. Un equipo de investigadores decidió poner a prueba esta teoría con dos experimentos:

En el primero, pidieron a dueños de gatos que, en lugar de llamar desesperadamente a su mascota con un “¡ven aquí, chiquitito, ven!” mientras el gato los ignoraba por completo, simplemente se sentaran, lo miraran y parpadearan despacito. ¿El resultado? Los gatos les devolvían el parpadeo y parecían más relajados.

En el segundo experimento, los investigadores probaron lo mismo con gatos que no los conocían. Aquí no solo lograron que los michis les correspondieran con otro parpadeo, sino que estos eran más propensos a acercarse a una mano extendida después del gesto.

PUBLICIDAD

En resumen, parpadear lentamente es la forma más efectiva de decirle a un gato “hey, tranquilo, soy tu compa”.

Tu gato te entiende más de lo que crees

Sí, es cierto, los perros suelen robarse todo el crédito por ser los más expresivos y amorosos, pero los gatos no se quedan atrás. De hecho, saben más sobre nosotros de lo que creemos, aunque prefieren fingir que no les importa.

Investigaciones recientes han descubierto que los gatos:

  • Responden mejor a las personas que les dan su espacio en lugar de perseguirlos como locos.
  • Pueden imitar la personalidad de sus dueños, lo que explica por qué algunos gatos son más sociables y otros más... digamos, “selectivos”.
  • Detectan cambios en nuestro estado de ánimo, aunque su forma de consolarte sea acostarse sobre tu laptop en el peor momento posible.
  • Reconocen sus nombres, pero los ignoran a propósito porque, bueno, son gatos.
  • Forman vínculos emocionales profundos con sus humanos, aunque su versión del cariño a veces incluya arañazos inesperados.

Así que, si sientes que tu gato no te pela, tal vez no sea un problema suyo, sino tuyo. Prueba el parpadeo lento y mira qué pasa.

Una técnica aprobada por la ciencia (y por los gatos más exigentes)

¿Por qué los gatos parpadean lentamente a los humanos? No hay una respuesta definitiva, pero hay dos teorías:

  • Es una señal de paz. En el mundo felino, mantener contacto visual prolongado puede interpretarse como una amenaza, mientras que parpadear despacio es su forma de decir “todo bien, colega”.
  • Nos han domesticado mejor de lo que creemos. Es posible que los gatos hayan aprendido que este gesto funciona con los humanos y lo usen a su favor. Básicamente, nos manipulan con ternura.

Sea como sea, si esto ayuda a mejorar la relación con tu minino, ¿qué importa el motivo?

La psicóloga Tasmin Humphrey, una de las investigadoras del estudio, sugiere que esta técnica podría usarse en refugios, veterinarias y otros entornos donde los gatos suelen estar estresados. Es una forma de transmitirles confianza sin necesidad de abalanzarte sobre ellos con ganas de abrazarlos (porque todos sabemos cómo termina eso).

Te puede interesar: [Audífonos In-Ear, On-Ear y Over-Ear: ¿Cuáles son los mejores?]

Así que ya sabes, la próxima vez que te cruces con un gato, olvídate de los sonidos ridículos y los besitos al aire. Haz contacto visual, parpadea lentamente y deja que la magia felina ocurra. ¿Lo vas a probar ahora mismo?

PUBLICIDAD

Tags


.

Lo Último