Entre el trabajo, los estudios y la familia el tiempo parece escaparse entre nuestros dedos. Y es que todo ocurre cada vez más rápido, y tenemos tiempo para todo menos para buscar formas de reducir el estrés de esa velocidad cotidiana. Por ello existen diferentes métodos para mejorar la productividad, y hoy traemos a colación una que nos parece más que interesante: la “Teoría del Armario” avalada por figuras como Steve Jobs, Bill Gates o el mismísmo Barack Obama.
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Se trata de un método que destaca por su efectividad y conexión con el minimalismo, pero llevado a un ámbito del día a día que con el tiempo hemos normalizado y que muchas veces significa un gasto innecesario de energía y concentración.
Qué es la “Teoría del Armario”
Hoy en día, encontrar soluciones prácticas para lidiar con el estrés cotidiano se agradece, pues al mismo tiempo afecta al bienestar personal y a la productividad laboral. Por eso, el enfoque de la “Teoría del Armario” radica en promover un estilo de vida más centrado y eficiente.
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¿Adivinaron? Hablamos de ir contra la corriente de la moda en la elección de vestimenta, para conservar energía y concentración, junto con evitar el consumo excesivo. Así lo han hecho ver personajes como el cofundador de Microsoft, Bill Gates, u otras figuras como Mark Zuckerberg, CEO de Meta y Steve Jobs de Apple, quienes adoptaron este método desde hace ya un buen tiempo.
Básicamente, se trata de reducir lo más posible las prendas del armario y dejar sólo lo esencial. El objetivo es tener un conjunto limitado y básico de ropa, para que en la práctica sea fácil elegir qué vamos a vestir. Esto ayuda a liberar tiempo, ahorrar energía mental y también dinero.
Científicamente, la efectividad de esta teoría radica en la reducción de la carga cognitiva asociada con las pequeñas decisiones diarias. Investigaciones sugieren que la capacidad del cerebro para tomar decisiones no es ilimitada, por lo que simplificar aspectos como la vestimenta puede traer un impacto positivo en la capacidad de concentración y decisión en otros ámbitos de la vida.
Así que ya lo saben: para combatir el estrés, sólo deben escoger unas pocas prendas y eliminar las demás. Esto además colaborará con una vida más sostenible y consciente del consumo, priorizando la calidad y la funcionalidad por sobre la variedad.
