Un nuevo estudio publicado por World Population Review, ha determinado cuáles son los países de Latinoamérica con menor coeficiente intelectual. Cabe recalcar que esta información se basa en la calidad de la educación y los factores sociales o económicos.
Este sería el listado que ofreció World Population Review:
- Bolivia - lugar 139 en el mundo - IQ 76,53
- El Salvador - lugar 162 en el mundo - IQ 69,63
- Honduras - lugar 185 en el mundo - IQ 62,16
- Nicaragua - lugar 193 en el mundo - IQ 52,69
- Guatemala - lugar 196 en el mundo - IQ 47,72
Es importante recordar que el coeficiente intelectual no es la única forma de medir la inteligencia. En realidad, hay muchas formas diferentes de buscar los países más inteligentes del mundo, y muchas de ellas no tienen nada que ver con el coeficiente intelectual promedio como el aquí mostrado.
Esto abriría un debate de sí nos encontramos ante una de las generaciones menos inteligente que la de sus padres.
Expertos lanzaron un duro estudio el cual dejaría en mal lugar a las futuras generaciones
Álvaro Bilbao es uno de los referentes más grandes en el mundo sobre todo lo que se refiere a poder entender el cerebro infantil. Según sus últimas investigaciones, pudo llegar a la conclusión de que esta sería la primera generación en toda la historia historia en la que el coeficiente intelectual de los hijos sea inferior al de los padres y estas son las razones.
La razón principal que explica Bilbao es que este suceso se debe a que la generación actual pasa más tiempo pegada a la pantalla leen menos en su día a día y tienen menos comunicación cara a cara, elementos básicos los cuáles desarrollan la inteligencia.
“Tradicionalmente los hijos han sido más inteligentes que los padres, los padres que los abuelos... por cosas sencillas como que hay acceso a los libros, que la educación mejora... pero en esta es posible que nuestros hijos no tengan el mismo cociente intelectual que nosotros, sino más bajo”., indicó Álvaro.
El referente en el estudio del cerebro infantil indicó que la sobreprotección infantil a pesar de ser una forma de afecto muy común en los padres, esto podría afectar a fisiología cerebral, tal y como revela un estudio en Japón: “Los niños a los que se les sobreprotege tienen un poco más fina la corteza prefrontal que es fundamental para la inteligencia, toma de decisiones, autocontrol, buen estado de ánimo, etc”.
