Microsoft ha lanzado una nueva actualización para Windows 11 que mejora el rendimiento de los videojuegos que reduce a menos de la mitad los tiempos de carga de algunos títulos.
De acuerdo con un informe publicado en el sitio web de Hard Zone, esta actualización también reduce drásticamente la carga del procesador, que además de mejorar el rendimiento recorta los tiempos de carga.
La actualización nos trajo la versión 1.1 de la tecnología DirectStorage, lanzada en marzo de este año y que permite que los sombreadores de la tarjeta gráfica accedan directamente a tu SSD NVMe sin tener que pasar por el procesamiento del procesador, lo que significa que se acelera la carga en los videojuegos.
DirectStorage también hace que se reduzca la carga del procesador y hace que la GPU lo maneje directamente, mejorando el rendimiento.
Tiempos de carga menores
Para demostrar lo poderosa que es la actualización, Microsoft compartió una comparativa que muestra que, anteriormente, una PC se tardaba 2,36 segundos en cargar 5,65 GB de recursos del juego, con el procesador trabajando al 100 por ciento.
Ahora, con DirectStorage 1.1, esos 5,65 GB de recursos se tardan solo 0,8 segundos en cargar, mientras que la CPU se mantuvo al 15% de carga como máximo, reduciendo el tiempo de carga, el consumo y la temperatura del procesador.
Con respecto a la tarjeta gráfica, la misma puede manejar los recursos apoyándose del SSD sin tener que pasar por la CPU, otro punto a favor de los gamers.
DirectStorage 1.1 ya está disponible para desarrolladores y es compatible con los controladores de los tres principales fabricantes de tarjetas gráficas, NVIDIA, AMD Intel.