Un grupo de usuarios de Rusia denunció a Netflix por haber suspendido el servicio: la compañía tomó la decisión en solidaridad con Ucrania, por la guerra.
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Desde marzo pasado, Netflix dejó de prestar su servicio en Rusia, además de detener todos los proyectos y adquisiciones en el país. Previamente se negó a transmitir 20 canales rusos de propaganda exigidos por la ley local.
Esta semana, 20 personas firmaron una demanda colectiva contra la empresa de origen norteamericano, con 100 personas más solicitando unirse, según RIA Novosti.
De acuerdo con Variety, la plataforma cuenta con cerca de un millón de suscriptores en Rusia desde su lanzamiento en 2016. Una suscripción a Netflix cuesta cerca de 799 rublos mensuales, un aproximado de 9.67 dólares.
Los aspectos legales de la demanda de Rusia a Netflix
El bufete Chernysov, Lukoyanov y Asociados, de Moscú, lleva el caso, que busca un resarcimiento por 60 millones de rublos, unos 720 mil dólares aproximadamente. Este monto incluye una indemnización por daño moral y una multa del 50% del monto otorgado por el tribunal.
El Tribunal Khamovnichesky, en la capital rusa, decidirá próximamente, basándose en el Código Civil de la Federación Rusa y la Ley de Protección de los Derechos del Consumidor.
Si la empresa norteamericana se niega a cumplir con la orden judicial, enfrenta una nueva sanción por cada día de retraso.
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“(Netflix) celebró un contrato público con suscriptores que no contempla la posibilidad de negativa unilateral a cumplir obligaciones”, señaló RIA, citando la demanda colectiva.
El conflicto en Ucrania
Rusia invadió Ucrania desde el pasado 24 de febrero, con el argumento de proteger la independencia de las regiones orientales de Luhansk y Donestk, además de “desnazificar” el país.
El gobierno ucraniano, bajo el mando del presidente Volodímir Zelensky, ha logrado frenar la ofensiva de las tropas de Vladímir Putin con armamento norteamericano y de otras naciones europeas.
Según las fuentes de lado y lado, se habla de 1.300-14.000 combatientes ucranianos y 1.351-19.000 soldados rusos muertos. La ONU indica que 1.892 civiles han perdido la vida; el gobierno ucraniano apunta a 4.500 civiles muertos.
El conflicto ha dejado más de 6.6 millones de refugiados y 7.1 millones de desplazados internos.
