El COVID-19 afecta a Tesla en China, la empresa de Musk busca mantener la producción

El COVID-19 tomó un nuevo auge en China y las autoridades luchan por evitar una nueva ola, lo que afecta la producción de Tesla en su gigafábrica de Shanghai.

La empresa de autos eléctricos de Elon Musk tuvo que suspender labores en su fábrica por dos días esta semana, de acuerdo con un aviso interno y a los proveedores revelado por Reuters.

“Estamos cooperando activamente con los requisitos del gobierno para las pruebas de ácido nucleico y otros requisitos de prevención de epidemias”, dijo la compañía en el comunicado.

“Al mismo tiempo, estamos haciendo todo lo posible para garantizar la producción, superando las dificultades juntos”.

En la actualidad, la compañía de Musk fabrica al año 1.1 millones de vehículos en China. Se espera que tengan una nueva factoría cerca de la actual, ubicada en el parque industrial Lin-gang Special Area.

A principios de marzo, cuando se anunció la construcción de la nueva fábrica, expertos citados por Reuters afirmaron que “Tesla tendrá la capacidad de producir hasta 2 millones de automóviles al año”.

Con la segunda fábrica en Shanghai, Tesla superaría a empresas como Toyota, que en 2021 produjo 1.6 millones de vehículos, o GM, que lanzó 1.4 millones de autos.

Las medidas de China frente al nuevo repunte del COVID-19

No obstante, hay preocupación frente al repunte de casos de COVID-19 en China. Es el peor brote desde el apogeo de la pandemia, en 2020.

En Shenzhen, la ciudad más grande de la provincia de Guangdong, de las potencias industriales en el mundo, todas las empresas no involucradas con los servicios públicos esenciales suspendieron la producción. También obligaron a que otros trabajaran desde casa.

La ciudad reportó más de 400 casos confirmados desde finales de febrero de 2022.

Mientras que Shanghai, donde se encuentra la gigafábrica de Tesla, superó los 600 casos confirmados desde finales de febrero.

Algunos vecindarios de la ciudad entraron en confinamiento, realizando pruebas masivas, de acuerdo con CNBC. Además, las autoridades locales dijeron a los residentes que no salgan de Shanghai a menos que sea absolutamente necesario.

Las clases presenciales fueron suspendidas, retomando las en línea.

Beijing, capital de China, identificó seis fuentes de transmisión para los más recientes casos municipales, en el centro y el este de la ciudad. Cuenta con una de las políticas de control de COVID-19 más fuertes del país.

Por ejemplo, los viajeros deben mostrar una prueba negativa tomada 48 horas antes de entrar a la ciudad, y realizarse otra prueba dentro de las 72 horas posteriores a la llegada.

Si su historial de viajes de 14 días muestra que visitaron un lugar con un caso confirmado, no se les permite entrar a la ciudad.