En Dragon Ball, los villanos son tan importantes como los héroes. Desde Freezer hasta Cell, pasando por Majin Buu y los Dioses de la Destrucción, la serie creada por Akira Toriyama sabe cómo construir antagonistas memorables.
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Sin embargo, entre tanta batalla épica y transformación dorada, varios personajes con potencial quedaron en el camino, relegados a cameos, muertes express o, directamente, al olvido. ¿Por qué Dragon Ball desperdició a villanos tan prometedores?
King Cold: el suegro galáctico que nunca pudo pelear
¿Quién no esperaba una épica batalla padre-hijo entre King Cold y Mecha-Freezer? El emperador galáctico apareció junto a su hijo para vengarse de Goku… y duró menos que una semilla del ermitaño.
Trunks del Futuro lo eliminó sin pestañear, y así se esfumó todo el potencial de un villano que podría haber expandido el lore de los Freezer. ¡Ni siquiera se dignaron a mostrar sus poderes!
Shen: el excompañero de Roshi que desapareció del mapa
El Maestro Shen tenía historia, peso emocional y una rivalidad clásica con el Maestro Roshi. Pero tras el 22º Torneo Mundial, desapareció más rápido que Launch en Dragon Ball Super.
Su muerte ni siquiera fue mostrada, y se perdió la oportunidad de explorar su redención o profundizar su vínculo con Roshi. Si hasta Tao Pai Pai volvió en Z… ¿por qué no él?
Burter y Jeice: mucho show, poco combate
Las Fuerzas Ginyu son puro estilo, pero Burter y Jeice se quedaron en las poses. Descritos como veloces y poderosos, no duraron nada contra Goku y nunca llegaron a demostrar todo lo que prometían. Ni sus técnicas combinadas pudieron salvarlos del olvido.
A falta de personalidad, ni el acento australiano de Jeice los rescató del archivo.
Raditz: hermano de Goku, descartado como enemigo
Tenía lazos familiares, historia Saiyajin y un look intimidante. Pero Raditz apareció, gritó un poco… y murió. Ni una redención, ni un flashback, ni una resurrección.
En una saga donde hasta Freezer volvió tres veces, es increíble que el hermano biológico de Goku no haya tenido otra oportunidad. ¡Lo mínimo era una reunión incómoda en la Tierra!
Dabura: diseño espectacular, final decepcionante
Rey del Reino Demonio, espada mágica, escupitajo que convierte en piedra... Dabura tenía el paquete completo. Pero Dragon Ball Z lo usó como carnada para mostrar que Buu era peor, y chau.
Otro personaje con estética brutal, poderes únicos y cero desarrollo posterior. ¿Y el Reino Demonio? Bien, gracias.
Dr. Gero: el genio olvidado de los androides
Creador de Cell, 17, 18 y su versión cíborg… y sin embargo, Dr. Gero fue eliminado como si fuera un soldado raso. Su mente brillaba más que su fuerza, pero nunca se exploró el potencial de una conciencia malvada capaz de volver a atacar desde otro androide.
Incluso Bulma podría haber tenido su propia némesis científica. Pero no.
Spopovich: el humano que merecía una historia más oscura
Su brutal combate contra Videl marcó a toda una generación de fans. Pero cuando parecía que Spopovich podía tener una evolución trágica o redención... Babidi lo reventó con su magia sin previo aviso.
Con un poco más de desarrollo, podría haber sido el Vegeta humano: un excontrolado por el mal en busca de redención. Pero quedó en carne de cañón.
¿Y si les hubieran dado otra oportunidad?
Todos estos villanos tenían algo único. Una conexión, una historia, un diseño, o simplemente un potencial tremendo. Pero en un universo donde los héroes mueren y vuelven diez veces, es una pena que estos antagonistas no tuvieran ni una segunda escena de gloria.
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¿Te gustaría ver a alguno de ellos de regreso en Dragon Ball DAIMA o futuras sagas? Porque si hay algo que Dragon Ball nos enseñó es que... nadie está verdaderamente muerto.