En el siempre expansivo y vibrante universo de Dragon Ball Super, la transformación más imponente y brutal que hemos visto hasta ahora no salió directamente de la pluma de Akira Toriyama, sino de su heredero artístico: Toyotaro. El dibujante actual del manga ha confirmado su autoría en la creación de Black Freezer, una revelación que no solo llena de orgullo al artista, sino que subraya cómo el legado de la saga sigue creciendo y evolucionando con ideas nuevas y explosivas que redefinen los límites del poder.
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La chispa creativa detrás de Black Freezer
La introducción de Black Freezer en el manga de Dragon Ball Super fue un auténtico terremoto para los fans. Después de un entrenamiento brutal y extenuante, el icónico villano regresó con una nueva y aterradora forma, superando por mucho los niveles de poder que Goku y Vegeta habían alcanzado hasta ese momento. Esta transformación, que lo envuelve en un aura oscura y le otorga una fuerza abrumadora, lo posicionó instantáneamente como el ser más poderoso conocido en el universo actual de la franquicia.

Lo que muchos no sabían es que esta poderosa evolución fue una creación directa de Toyotaro. Tal como lo recogió Vandal, el propio artista expresó su profundo orgullo por haber concebido esta forma para el icónico tirano galáctico. En sus propias palabras, se siente “muy orgulloso de haberlo creado”. Este tipo de declaraciones no son comunes y destacan el nivel de libertad creativa y la confianza que se le ha depositado a Toyotaro para expandir el universo que Toriyama comenzó.
Toyotaro: Más que un aprendiz, un co-creador del legado Saiyajin
La relación entre Akira Toriyama y Toyotaro siempre fue de maestro y aprendiz, con Toriyama supervisando de cerca el trabajo de Toyotaro en Dragon Ball Super. Sin embargo, a medida que la serie avanzaba, Toyotaro ha ido ganando más autonomía creativa, desarrollando ideas y personajes bajo la bendición y, a menudo, la revisión final de Toriyama. La creación de Black Freezer es el ejemplo más potente de esta evolución.

Esto demuestra que Toyotaro no es solo un ilustrador que sigue al pie de la letra las directrices, sino un verdadero co-creador que aporta ideas significativas al canon de Dragon Ball. Su capacidad para introducir una transformación tan impactante y lógicamente encajada en la narrativa, manteniendo la esencia del personaje y el sistema de poder de la serie, es un testimonio de su talento y su profunda comprensión del universo de Toriyama.

La existencia de Black Freezer, concebida por Toyotaro, abre nuevas puertas para futuras batallas y desarrollos argumentales, asegurando que la saga siga siendo emocionante e impredecible incluso después de la trágica partida de su creador original. El orgullo de Toyotaro por esta creación es un reflejo del esfuerzo y la pasión que pone en mantener vivo y vibrante el legado de Dragon Ball.

