Hace dos décadas, el empresario sueco Raphaël Domjan concibió una audaz idea: dar la vuelta al mundo en un barco solar. La inspiración le llegó tras un viaje a Islandia en 1993, donde quedó impactado por el deshielo de los glaciares, señal del cambio climático. Decidió demostrar el potencial de las energías renovables con un navío único en su clase, pero el proyecto requería financiamiento.
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Tras años de búsqueda, en 2008, el empresario alemán Immo Ströher aportó los fondos necesarios para hacer realidad el proyecto. Se inició entonces la construcción del barco, diseñado por el arquitecto naval neozelandés Craig Loomes y construido por el astillero alemán Knierim Yachtbau.
En 2010, el MS Tûranor PlanetSolar, equipado con más de 500 metros cuadrados de paneles solares y baterías de iones de litio, estaba listo para zarpar.
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El 27 de septiembre de 2010, el barco partió de Mónaco con la misión de circunnavegar el globo. Después de recorrer el Atlántico, el Pacífico y el Índico, y de un año, siete meses y siete días en alta mar, regresó a Mónaco en abril de 2012. Durante todo el viaje, el PlanetSolar funcionó exclusivamente con energía solar, batiendo varios récords en el camino.
Tras completar su misión, el PlanetSolar cambió de propietarios y se convirtió en Race for Water, enfocado en concienciar sobre la contaminación plástica de los océanos. Sin embargo, en agosto de 2022, mientras navegaba por la India, sufrió un incendio en el área de las baterías, lo que obligó a una evacuación de emergencia.
Aunque el barco sobrevivió, pasó a llamarse MS Porrima y fue transferido a una nueva asociación.
Raphaël Domjan, por su parte, sigue comprometido con proyectos de energía solar. En 2014, ideó el avión SolarStratos para alcanzar la estratosfera, y en 2024 buscará batir el récord mundial de altitud para una aeronave de este tipo.
El legado del PlanetSolar trasciende sus desafíos y reveses, demostrando el poder de la innovación y la energía renovable en la exploración y la conciencia ambiental.