Super Game Boy fue un accesorio para Super Nintendo que posibilitaba jugar con cartuchos de Game Boy en la consola de sobremesa. A pesar de su gran potencial, no fue completamente aprovechado, pero sus fallas influyeron en el desarrollo del posterior Game Boy Color.
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¿Cómo funcionaba?
Lanzado en 1994, el Super Game Boy permitía disfrutar del catálogo de Game Boy en el televisor utilizando circuitos internos de la consola portátil.
Aunque proporcionaba ventajas adicionales, como el juego para dos jugadores en la misma Super Nintendo y la personalización de paletas de colores, enfrentó distintos problemas que minaron su impacto en el mercado.
Este dispositivo funcionaba ligeramente más rápido que la Game Boy, lo que provocaba problemas de rendimiento, sincronización de audio y fue prohibido en competiciones de speedrunning.
Una falta de interés vital para Nintendo
A pesar de sus ventajas, pocas empresas aprovecharon las características únicas del Super Game Boy en sus juegos. La falta de interés por sus capacidades adicionales influyó en que muchos desarrolladores no agregarán contenido específico para este dispositivo.
No obstante, todos estos desafíos influyeron en la estrategia de Nintendo al momentos de lanzar Game Boy Color, estableciendo normas estrictas para asegurar que los juegos ofrecieran una experiencia mejorada y distintiva en comparación con su predecesor.
Aunque se lanzó una versión mejorada, Super Game Boy 2, exclusivamente en Japón en 1998, este dispositivo tuvo limitaciones similares a su predecesor.
El Game Boy Player de GameCube, lanzado en 2003, se asemejó al Super Game Boy al permitir jugar a juegos de Game Boy, Game Boy Color y Game Boy Advance en la consola, pero no heredó todas sus características adicionales, como la personalización de marcos.
