El temible príncipe de los saiyajins, Vegeta, aparece en el primer arco de Dragon Ball Z. Un villano de otro planeta amenaza con destruir la vida de toda la Tierra, con la simple intención de comercializar el mundo.
Pero antes será capaz de asesinar uno a uno a los guerreros que se interpongan en su camino. Las batallas son la gasolina que le da impulso a su forma de vida; algo que tiene como característica cualquier saiyajin de raza pura.
En el medio de esta cruzada que emprende junto a Nappa, se entera de la existencia de las esferas del dragón. Y aunque sigue con sus intenciones de matar a quien sea que se le cruce por el medio cambia sus intereses: ahora también quiere obtener la vida eterna para salir del yugo de Freezer, hasta ese entonces su amo.
La descripción de este personaje es sin duda la de alguien a quien los Guerreros Z no quieren tener cerca. Sin embargo, el príncipe de los saiyajin no solo termina siendo parte de esta familia, sino que además se casa con una terrícola y tiene un par de hijos: ahora es un protector de la Tierra, la galaxia y todo el Universo 7. No hay intereses de por medio, aunque suene descabellado, lo hace por amor.
Este cambio radical en su personalidad es lo que hace que una teoría afirme que Vegeta es uno de los mejores personajes de Dragon Ball. ¿Qué le pasó? ¿Qué cambió en el príncipe de los saiyajins?
Vegeta y su evolución como integrante de los Guerreros Z
Basados en una teoría que publica Alfa Beta Juega, nos disponemos a analizar el desarrollo de Vegeta como personaje.
Ciertamente el príncipe de los saiyajins es uno de los mejores personajes. Sin espacio mínimo para la duda es el que registra mayor evolución. Sería fácil decir que el hecho de que tenga dos hijos y una esposa terrícolas es suficiente para que él defienda el planeta.
Y sí, eso tiene mucho que ver, pero no es el todo. La saga de Cell y los androides nos lo demuestra. En ese momento solo le interesaba superar los poderes de un Super Saiyajin y no le importaba lo que le sucediera a su bebé Trunks y Bulma, algo que sorprendía a su hijo viajero del tiempo.
Pero la muerte de ‘Future Trunks’ en el regreso de Cell fue el primer clic en su manera de ver las cosas; fue la primera vez que demostró tener sentimientos hacia otra persona que no fuera él mismo.
El orgullo saiyajin
Después de eso siguieron ocurriendo eventos en los que Vegeta demostró querer lo mejor para su familia. La vez que neutralizó a Trunks para pelear contra Majin Buu y proteger la vida de su hijo o el momento en el que desató su furia contra el Dios de la Destrucción porque lastimó a Bulma son los dos ejemplos más claros.
Pero la cosa con Vegeta es que no para de crecer. Recientemente nos ha quedado demostrado que todavía quedaban algunos vestigios de este antiguo príncipe de los saiyajins, con la obtención de su Ultra Ego.
Entonces, llegó el viejo mensaje de Bardock a través de un rastreador que guardaba Monite, en el arco de Granola, el sobreviviente. El hecho de que el padre de Goku protegiera a un niño y que dijera que un saiyajin prefería morir antes que huir de una batalla, le recordó el verdadero significado del orgullo de su raza.
Si comparamos a Vegeta con el resto de los personajes, es el único que se encuentra en un constante desarrollo y crecimiento como persona. Por lo tanto, al menos en estas características, se alza como uno de los mejores personajes de Dragon Ball.

