El animé de Naruto, producido por Pierrot, distribuido por Aniplex y transmitido por TV Tokyo inicialmente, con 220 exitosos episodios y que provocó la llegada de la secuela Naruto: Shippuden el 15 de febrero de 2007, es una de las adaptaciones más aclamadas de la historia.
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La obra escrita e ilustrada por Masashi Kishimoto se publicó originalmente en la revista Weekly Shōnen Jump de Shueisha de 1999 a 2014 y sigue al ninja protagonista que viste de naranja y que sueña con convertirse en el líder de su aldea, con el Zorro de Nueve Colas encerrado en su interior.
Como muchos saben, la última sección de la serie de shonen estuvo centrada en el hijo de Naruto, Boruto, lanzada en abril de 2017, llamada Boruto: Naruto Next Generations, que fue escrita por Ukyō Kodachi, ilustrada por Mikio Ikemoto y supervisada por Masashi Kishimoto.
Este spin-off presentó las aventuras y formación de Boruto Uzumaki, quien protagoniza todo lo que ocurre entre la nueva generación de ninjas de la Aldea Oculta de la Hoja, con Naruto como el Séptimo Hokage.
Para muchos, Boruto es un mejor personaje que su padre y hay una razón definitiva que lo confirma.
La razón por la que Boruto es mejor que Naruto
Como explica el informe publicado en el sitio web de Alfa Beta Juega, Boruto ha tenido un mejor desarrollo como personaje que el propio Naruto.
Padre e hijo en sus demostraron tener una actitud un tanto rebelde, en contra de las reglas y de todos, solo por un poco de atención. En el caso de Naruto, tuvo una infancia triste y dura, condenado a la soledad por ser el portador del Kyubi.
Boruto, por su parte, trata de llamar la atención de su padre que ya no comparte mucho tiempo con él por sus compromisos como Hokage, lo que lo lleva a crear un profundo resentimiento hacia su padre, al punto de desafiar cada una de sus órdenes.
Pero hubo un momento en el desarrollo de Boruto que cambió su actitud y personalidad: durante los exámenes Chunin, en los cuales se le ocurrió hacer trampa al usar herramientas científicas ninja, Naruto se da cuenta y rápidamente lo revela ante los espectadores del examen, exponiendo a su hijo y la traición que realizó a los principios ninjas.
Esto llevó a Boruto a un drástico cambio: decidió prescindir del uso de estas herramientas y entrenar fuertemente para demostrarle a su padre de que estaba hecho y su valor como ninja. Desde ese momento, dejó de romper las reglas y se convirtió en un gran ejemplo.