La familia es parte de la historia de todos los personajes de Dragon Ball. Akira Toriyama se encargó de darles a casi todos los que conocemos un padre, hermano, abuelo o acompañante con quien estableciera un lazo. Sin embargo, casi nadie conoce la historia de Kreeza, el poco mencionado hijo de Freezer, de quien te vamos a contar en esta reseña.
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El primer vistazo de Freezer en las historias de Akira Toriyama se registró en el segundo arco de Dragon Ball Z. Un malvado emperador con poder fuera de nuestra imaginación estaba buscando las esferas del dragón para pedir la inmortalidad: ¡Qué peligro!
Freezer, además, nos entregó información de la historia hasta ese momento casi nula del pasado de la raza saiyajin. Pero poco se decía de cuál era raza u origen en el universo. De hecho, no fue hasta después de su derrota, reconstrucción e intento de venganza que supimos que tenía un padre: el Rey Cold, eliminado por el Trunks del futuro.
Allí, según lo que sabíamos, se cortaba el árbol genealógico de esta familia del mal. Pero después, gracias a un hilarante spin-off escrito por el mismísimo Akira Toriyama, nos entregarían un giro inesperado: Kreeza, el pequeño hijo de Freezer.
¿Dónde aparece Kreeza?
De acuerdo con lo que publica el Fandom oficial de Dragon Ball en Internet, Kreeza o Kuriza es el hijo biológico de Freezer. Es un mutante alienígena con un gran poder que aparece en el manga paródico Neko Majin Z.
Sus rasgos, como lo apreciamos en la imagen que está arriba, son muy similares a la de su padre. Tiene los mismos colores en la piel y también controla su nivel de fuerza con transformaciones. La diferencia es que como es todavía corto de edad, solo tiene una transformación.
Su estatura es mucho más baja que la de Freezer, quien de por sí ya es pequeño en su forma final. Kreeza llega a la Tierra en una línea temporal en la que Vegeta todavía responde a las órdenes del malvado conquista mundos.
Conoce a nuestro planeta debido a que llegó por intermedio de Onio, un saiyajin que aparece en este manga y que busca vengarse precisamente del gracioso Z (Neko Majin). Allí se desarrolla una breve pelea entre ambos que se resuelve con un solo golpe.
Kreeza ejecuta su transformación final, pero la historia del manga no permite que veamos su verdadero poder. En este mismo episodio aparece Vegeta, quien llega a la escena para recoger al pequeño alienígena por órdenes de su jefe en ese momento, Freezer.
El hijo del poderoso villano vuela, lanza poderes a base de energía como cualquier otro guerrero y con mucho entrenamiento podría alcanzar una gran fuerza. Sin embargo, es probable que nunca lo veamos en acción en algún arco de Dragon Ball Super.