¿Peter Jackson haciendo una nueva película? No por ahora. El director detrás de los épicos viajes por la Tierra Media tiene otro tipo de misión entre manos: quiere revivir al moa, un ave gigante que desapareció de Nueva Zelanda hace siglos y que, por su tamaño, bien podría haber compartido pantalla con un Balrog.
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Más que un director, un coleccionista de huesos
No es broma. Jackson es el mayor coleccionista de huesos de moa en el mundo y, ahora, también es uno de los principales inversionistas de Colossal Biosciences, una empresa especializada en traer especies extintas de vuelta a la vida. Sí, como en Jurassic Park, pero sin los velocirraptores (por ahora).
¿Y qué es un moa? Básicamente, una avestruz gigante que podía medir hasta 3.6 metros y pesar más de 200 kilos. Una gallina con complejo de jefe final.
El cine puede esperar
Jackson lo tiene claro: “Traer de vuelta al moa me emociona más que cualquier película que haya hecho”. No es que haya colgado la claqueta para siempre.
De hecho, está escribiendo tres guiones nuevos y, junto a su equipo de confianza (Fran Walsh y Philippa Boyens), está trabajando en The Hunt for Gollum, una nueva entrega de El Señor de los Anillos que llegará en 2027.
Pero entre escribir batallas élficas y planear el regreso de Gollum, su corazón late por esos pájaros gigantes que marcaron su infancia como estudiante neozelandés.
¿Revivir aves con ciencia? Suena complicado
Y lo es. El gran reto es que, a diferencia de los mamíferos, las aves nacen en huevos. Así que usar tecnología genética para crear un moa moderno requiere mucho más que una incubadora casera. Aun así, con 15 millones de dólares invertidos, Jackson y su equipo no se rinden.
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Quién diría que el próximo gran regreso no sería en la taquilla, sino en el bosque.