A todos nos ha tocado ver esa imagen que transmite miedo: el momento en el que hay una persona colgada de un décimo piso limpiando las ventanas de un edificio, una tarea arriesgada que es el día a día para muchos trabajadores. Pues esta imagen icónica de las grandes ciudades podría estar a punto de cambiar radicalmente gracias a Ozmo, un avanzado robot limpiacristales de la empresa Skyline Robotics que promete hacer esa labor.
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¿Cómo funcionarán?
En un paso más que prueba el avance de la inteligencia artificial. Este robot funcionará con ella y además, contará con tecnología de sensores para realizar la limpieza de ventanas de manera más rápida y segura que los humanos. Esto lo logrará estando equipado con dos brazos robóticos de la marca Kuka, este sistema puede adaptarse a las complejidades arquitectónicas de los edificios más modernos, incluso en condiciones climáticas adversas.
Una de las principales ventajas de Ozmo es su eficiencia. Con ayuda de la IA será capaz de planificar la ruta de limpieza de manera óptima, evitando obstáculos y adaptándose a las irregularidades de la fachada. Además, su capacidad para operar en condiciones climáticas extremas lo hace ideal para su uso en cualquier parte del mundo.
Estos avances tienen siempre un lado negativo para un sector de la población pues su implementación pone en severas dudas el trabajo de los limpiacristales. Si bien esta tecnología ofrece importantes beneficios en términos de seguridad y eficiencia, también genera preocupaciones sobre el impacto en el empleo ya que la automatización de esta tarea podría desplazar a numerosos trabajadores.
También existe una contraparte pues los defensores de esta tecnología argumentan que Ozmo no eliminará por completo la necesidad de trabajadores humanos. Por el contrario, sugieren que los trabajadores podrían ser rentrenados para desempeñar roles de supervisión y mantenimiento de los robots, lo que les permitiría acceder a empleos más seguros y mejor remunerados.
