La batería de iones de litio tiene sus días contados. Aunque sigue usándose, la tecnología ha avanzado tanto que existen varias alternativas a su uso, de mayor duración y sostenibilidad.
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Productos electrónicos de consumo portátiles, como teléfonos móviles y ordenadores, y autos eléctricos, todos usan como primera opción la batería de iones de litio.
Destaca por su alta relación potencia – peso, eficiencia energética, rendimiento a altas temperaturas y baja autodescarga. Además, la mayor parte de sus componentes se puede reciclar.
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Pero su producción depende del litio, un recurso limitado con un enorme impacto ambiental. Es por ello que las grandes empresas están mudándose hacia otros tipos de batería.
Las alternativas a la batería de litio
Veamos a continuación cuáles son los otros tipos de batería que están irrumpiendo en el mercado.
La primera que debemos conocer es la batería de hidruro metálico de níquel. Se usa habitualmente en equipos informáticos y médicos, pero además en los vehículos HEV (híbridos) y su energía específica es acorde con el equipo.
Su ciclo de vida es mucho mayor que el de la batería de plomo – ácido, siendo segura y tolerante al abuso. Lo negativo: su alto costo, la alta autodescarga y la generación de calor a altas temperaturas.
Otra batería destacada en el mercado es la de plomo – ácido. Es de alta potencia, económica, segura y confiable, pero tiene en su contra la baja energía específica, el poco rendimiento a bajas temperaturas y el corto ciclo de vida.
Los ultracondensadores pertenecen a un tercer tipo de batería. Almacenan energía en un líquido polarizado entre un electrodo y un electrolito. Su capacidad de almacenamiento de energía aumenta a medida que lo hace la superficie del líquido.
Son útiles como dispositivos secundarios de almacenamiento de energía en vehículos eléctricos, ya que ayudan a las baterías electroquímicas a nivelar la potencia de carga.
También destacan las baterías de litio – azufre, que reemplazan al cobalto con azufre como material catódico, siendo éste mucho más abundante y ecológico que el litio.
Una batería que también está siendo utilizada es la de iones de sodio, que reemplaza los iones de litio por los del sodio, mucho más abundante en nuestro planeta. Tiene en contra la menos densidad de energía y un tiempo de vida más reducido.