Las innovadoras baterías de hierro-aire, respaldadas por Bill Gates y Jeff Bezos, están a punto de revolucionar el sector energético en Estados Unidos.
La compañía Xcel Energy ha anunciado que Breakthrough Energy Catalyst ha comprometido una subvención de 20 millones de dólares para apoyar dos proyectos de almacenamiento de energía a largo plazo, diseñados para maximizar el uso de fuentes renovables y garantizar la confiabilidad de la red eléctrica.
La subvención de 10 millones de dólares para cada proyecto se destinará a la implementación de sistemas de baterías de hierro-aire de 10 MW/1000 MWh, siempre y cuando se cumplan ciertas condiciones de financiamiento, de acuerdo con El Periódico de la Energía.
Xcel Energy y la empresa Form Energy, con sede en Massachusetts, anunciaron previamente un acuerdo para construir estas baterías en los sitios de las plantas de carbón que serán retiradas: la planta generadora del condado de Sherburne en Becker, Minnesota, y la planta generadora Comanche en Pueblo, Colorado.
Las ventajas de estas baterías
Estas baterías permitirán a Xcel Energy almacenar la energía generada por fuentes renovables como la energía solar y eólica durante los períodos de alta producción, para luego distribuirla en momentos de menor generación. Destacan que el almacenamiento a largo plazo es fundamental para lograr una electricidad libre de carbono y alcanzar los objetivos de energía 100% renovable.
Las baterías de hierro-aire de Form Energy ofrecen una capacidad de almacenamiento excepcional, ya que pueden suministrar electricidad durante hasta 100 horas a un costo competitivo en comparación con las plantas de energía convencionales.
Esta innovación permitirá a Xcel Energy integrar una mayor cantidad de energía renovable de bajo costo en su red eléctrica, a la vez que mantiene la confiabilidad del suministro, ya que planea retirar todas sus plantas de carbón para el año 2030.
Además de la subvención, Xcel Energy tiene previsto aprovechar las disposiciones de la Ley de Reducción de la Inflación, como los créditos fiscales para energías renovables, con el fin de reducir aún más el costo de implementación de las baterías de hierro-aire. Se espera que los proyectos estén operativos a partir de 2025, sujetos a las aprobaciones regulatorias correspondientes en cada estado.