ChatGPT, el prototipo de chatbot de Inteligencia Artificial que es furor en redes, continúa en proceso de aprendizaje. Es por ello que aún muchas respuestas estén erradas, como la del ejemplo a continuación.
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Un usuario escribió: “La madre de Juan tiene 4 hijos. Tres de ellos se llaman Pedro, María y Lucas. ¿Cómo se llama el cuarto?”.
La respuesta de ChatGPT: “No se puede determinar cómo se llama el cuarto hijo de la madre de Juan, ya que no se proporciona suficiente información”.
El servicio, lanzado en noviembre pasado, se basa en el modelo GPT-3.5 de Open AI, una versión mejorada de GPT-3.
Se le ha elogiado, incluso temido, por su capacidad de desarrollar ensayos largos sobre cualquier tema. No obstante, aún le falta en determinadas áreas.
La lógica de la Inteligencia Artificial, en ascenso
Seamos justos, no todas las personas pueden captar a la primera la pregunta de “La madre de Juan…”, pero el punto es que la máquina no es aún capaz de superar al ser humano en el pensamiento.
“Es normal, todavía falta una parte de lógica que, con el tiempo, la interacción con los usuarios acabará por solucionar”, señala en Twitter Javier Vega, un experto en el tema.
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“La pregunta es, ¿de verdad estamos preparados para que utilice la lógica? En el momento que tengamos una IA que use la lógica con crecimiento exponencial… miedo”, añadió Vega.
Otra persona interactuó con ChatGPT usando una vieja adivinanza: “Oro parece, plata no es. ¿Qué es?”.
Respondió el chatbot: “La respuesta a la adivinanza es ‘Latón”, enfocándose en la aleación de cobre y zinc.
Cuando los usuarios le han repreguntado a ChatGPT sobre el nombre del cuarto hijo de la madre de Juan, a algunos les ha respondido lo mismo: “No se proporciona información sobre cómo se llama el cuarto hijo”.
Con otros sí corrige, diciendo “Lo siento, entiendo que Juan es el cuarto hijo de la madre”.
Las limitaciones de ChatGPT, según OpenAI
OpenAI reconoce las limitaciones de ChatGPT. “A veces escribe respuestas que suenan plausibles, pero incorrectas o sin sentido”, indican en su portal. Además, es sensible a los ajustes en la redacción de entrada, o si bien la persona intenta el mismo aviso varias veces.
Otra de las limitaciones de la Inteligencia Artificial es que “el modelo suele ser excesivamente detallado y abusa de ciertas frases, como reafirmar que es un modelo de lenguaje entrenado por OpenAI”. Sus creadores indican que surgen de sesgos en los datos de entrenamiento y problemas de sobreoptimización.
En todo caso, recalcamos: ChatGPT está entrenándose aún, su aprendizaje continúa. El día que esté totalmente desarrollado, debemos temer. Preocuparnos, al menos.
