Ciencia

¿Respiración por el trasero? Estudio propone la oxigenación por el intestino para pacientes con insuficiencia respiratoria

El extraño experimento científico de la respiración por el trasero viene de un pez. Ya fue probado en roedores y cerdos.

Si piensan que el examen de próstata es incómodo, puede que estén prontos a encontrar algo mucho más complejo. Un estudio está analizando las posibilidades de aplicar en humanos la oxigenación por el ano, como método clínico para pacientes que presenten insuficiencia respiratoria.

Según lo que reseña Hipertextual la iniciativa es impulsada por una agrupación científica de varias universidades en Japón. No es nueva, apareció hace un par de años como un simple estudio teórico basado en la forma de respirar de una especie de peces.

En todo este tiempo pasó de concepto a la práctica, primero en roedores y ahora en cerdos. En ambos casos funcionó y ahora afinan los últimos detalles para comenzar ensayos clínicos en personas. Esto se daría en 2023, pues ya se encuentran buscando aprobación demostrando que el método es realmente efectivo.

Los peces de donde viene este inusual mecanismo se llaman loaches. Se llama respiración intestinal. Los animales de agua tienen su propio sistema de branquias normales.

Pero cuando se someten a entornos en los que hay poco acceso al oxígeno, activan el método secundario que funciona a través del intestino tomando aire por medio del ano.

Oxigenación por el trasero

La cosa debería funcionar de la siguiente manera. En primer lugar, se introduce el oxígeno por medio del ano. Entonces, ese proceso de intercambio de gases que comúnmente funciona en los pulmones ocurre en el intestino.

En los loaches (los peces) sucede de forma natural por que el intestino de los peces hay una capa epitelial fina que cuenta con buen número de capilares y glóbulos rojos por los que transita el oxígeno sin problemas.

Lograron hace los mismo con ratones y también con cerdos, por lo que pronto estarán en búsqueda de voluntarios humanos que tengan insuficiencia respiratoria.

Tanto en humanos, ratones o cerdos, o básicamente mamíferos, es necesario modificar las condiciones del intestino para recrear las condiciones de los loaches. Lo hacen raspando las paredes con la intención de hacer un epitelio más delgado.

El resultado, en principio, fue doloroso para los ratones. Fue entonces cuando probaron una segunda opción, la de introducir el oxígeno en forma de líquido.

Los expertos introdujeron una combinación de perfluorodecalina oxigenada. El líquido demostró tener buena capacidad de integración con O2 y CO2 para hacer el intercambio de gases con el intestino más amigable.

Respiración por el trasero. Imagen extraída de Hipertextual
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