Ciencia

¿Realmente es necesario tomar dos litros de agua al día?

Es una recomendación de salud que escuchamos una y otra vez

El agua es un componente muy importante de nuestro cuerpo: no se considera una biomolécula -como sí son los lípidos o el ADN-, pero sin ella la mayor parte de las funciones de nuestro cuerpo no serían posibles.

Todas nuestras células contienen agua en su interior, prácticamente son bolsitas de agua, con varias sustancias en suspensión, rodeadas de una membrana de grasas y proteínas.

Así que nuestro cuerpo tiene un buen porcentaje de agua: se considera que en los adultos corresponde a un 60% de la masa corporal.

Pero esa cantidad de agua no es totalmente constante: ni a lo largo de nuestra vida, ni en los diferentes momentos del día.

Se considera que en nuestras actividades diarias y en las funciones de excreción, perdemos entre 2 y 3 litros de agua cada día. De ahí surge esa idea tan extendida de que debemos beber esa cantidad, y así reponer toda la que perdemos. Veamos si realmente es así.

¿Dos litros de agua diarios?

En realidad la cantidad de agua que necesitamos beber cada día depende de muchos factores, para empezar nuestra edad y nuestro peso.

En la niñez tenemos un porcentaje de agua más alto, así que los niños pueden requerir más agua, en proporción a su peso, comparados con los adultos.

La época del año y el clima de la zona en la que vives contribuyen a tus requerimientos de hidratación: la cantidad de agua que necesitas cada día, no será igual si estás en un lugar muy cálido, ya sea húmedo o seco. Tu localización geográfica también importa: a mayor altitud, puedes tener una mayor deshidratación y por lo tanto necesitar tomar más agua.

Y no hay que olvidar que tu alimentación también cuenta: no toda el agua que usamos para reponer la que perdemos debe venir de vasos de agua.

Si consumes frutas y verduras, o alimentos contienen agua, como jugos y sopas, también te hidratas. Pero cuidado, porque existen algunas cosas que pueden promover que pierdas más agua: comida muy saladas.

Debes tomar en cuenta otras cosas, como tu condición de salud: si estás en un tratamiento con medicamentos diuréticos, podría resultar que te estuvieras deshidratando más. También si estás enfermo y tienes fiebre puedes necesitar beber más de 2 litros de agua al día, igual que si eres una mujer embarazada o lactante.

Por supuesto tu actividad física determina qué tanto te deshidratas y podría ser que necesitaras beber más agua.

Hidratación psicológica

Pero entonces, ¿cuánta agua debo tomar cada día?, ¿hago una lista con los vasos de agua que bebo?, ¿compro una botella que indique las porciones de agua que debo tomar cada hora?, ¿tomo más agua si tengo calor?, ¿o si hago ejercicio?

En realidad podría resultar que tus necesidades de hidratación puedan tener más que ver con tu percepción que con las necesidades reales de tu cuerpo.

Un estudio hecho en 2013, encontró que una leve deshidratación al hacer ejercicio no disminuye tu rendimiento. Excepto cuando estás pensando que necesitas tomar agua.

Lo que hizo un grupo de investigadores fue medir el desempeño de ciclistas, al perder hasta un 3% de masa corporal al sudar por ejercitarse, y compararlo con el que tenían cuando se hidrataban.

La rehidratación se hacía por vía intravenosa, de modo que los ciclistas no tenían una referencia de cuánta agua reponían: así que los que estaban completamente hidratados se desempeñaban igual, que aquellos que no lo estaban.

Esto indica la importante relación psicológica que tenemos con nuestro consumo de agua. Y como es complicado que puedas sobrehidratarte: tus riñones harán un buen trabajo eliminando el agua sobrante, entonces si “sientes” que necesitas tomar más agua, adelante, ve por otro vaso de agua.

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