Otro engaño de redes sociales y de nuevo en Japón: una voluptuosa youtuber en realidad era un señor de 37 años con pechos falsos

Internet es una inmensa plataforma en la que mentir se hace muy fácil. Cualquiera puede generar una ilusión o fantasía visual y con ella atraer millones de seguidores que no tienen idea de la realidad. Este concepto suele ser muy radical, pero la verdad es que muchas veces se cumple. Si no lo creen miren este nuevo caso de una influencer o youtuber. A través del programa de videos generaba contenido fitness en el que resaltaba sus atributos corporales. Hasta que un día, con la intención de celebrar una importante cifra de suscriptores, reveló su verdadero rostro e identidad de género.

Cualquiera que vea un video (abajo vamos a colocar varios), aprecia que se está en la presencia de un cuerpo de mujer bien cuidado. Más allá de los gustos que pueda tener cualquiera por la parte instintiva o sexual, este personaje se dedicaba a los ejercicios. Entonces, para quien no estuviera pendiente de sus atributos, podía seguir a esta (o este) influencer y aplicar sus consejos fitness.

Algo que quizás debió llamar la atención es que en los planos cerrados de cada video, no aparece el rostro. Por lo general la cámara enfocaba a sus senos, abdomen, trasero y piernas. Mientras que, cuando realizaban planos generales, intencional y responsablemente, la (el) youtuber salía en cámara con el tapabocas. Entonces, se volvía complicado saber que se trataba de un hombre.

Y con esto no queremos que se malinterprete esta reseña. Si este japonés se sentía mujer y así lo quería expresar, es una situación por demás aceptable. Sin embargo, esa no era su finalidad, debido a que él mismo se desenmascaró. Quería resaltar los atributos de una mujer, para obtener mejores dividendos en su plataforma de redes sociales.

La verdad del youtuber

Reseña el portal de Gizmodo en español que la carrera de este youtuber inició en diciembre del 2020. A medida que fue subiendo contenido (apenas tiene 9 videos), fue ganando adeptos. Hasta que en un momento llegó y superó la barrera de los 20.000 suscriptores en tan solo tres meses. Para él fue el momento perfecto para decir la verdad. Y lo hizo saber con otro de sus materiales audiovisuales. En el mismo detalla que utilizó una peluca y senos postizos todo el tiempo. Además, se colocó algo de maquillaje para despistar y nada más, el engaño se hacía productivo.

De inmediato, muchos lo tomaron a mala manera y las suscripciones se comenzaron a cancelar. Hoy, miércoles 7 de abril, ya bajó de los 20.000 y acumula 18.600 followers.

¿Excusas o justificación?

El youtuber manifestó que el bombillo se prendió en su cabeza el año pasado. Justo después de recibir un recorte salarial en la empresa que trabajaba, producto de la pandemia del coronavirus. Asimismo, le suma un relato, estremecedor (si es cierto), en el que afirma que a su perro le había dado cáncer y necesitaba el dinero para el tratamiento. «Sabiendo que a las chicas atractivas les resulta más fácil atraer una audiencia online, me animé», dijo el hombre de 37 años.

Se recuerda con cierta gracias que hace unas semanas ocurrió un caso similar. También en Japón una influencer recorría el país en moto y mostraba su hermoso y delicado rostro. Pero en realidad era un hombre haciendo un gran uso de la FaceApp.