Ciencia: ¿Qué es y para que sirve un trasplante fecal?

La ciencia ha descubierto algunos de los métodos más interesantes para poder mejorar la saluda de las personas. Entre algunas de esas, podemos encontrar trasplantes de distintas partes del cuerpo, ya sean órganos o alguna extremidad.

Pero una de las cosas más interesantes, sin duda alguna, es el trasplante fecal, el cual es exactamente lo que crees: un trasplante de las heces fecales de un individuo a otro.

Así que si en algún momento has escuchado sobre esto pero tienes dudas de cómo es que funciona, entonces te lo diremos a continuación.

La ciencia trabaja de formas explicables

La flora intestinal es una de las cosas más interesantes que tiene nuestro cuerpo, pues es dentro de esta que podemos encontrar formas de vida que son benéficas para nuestro organismo y para nuestra salud.

Dentro de nuestro cuerpo hay incontables bacterias que ayudan con la digestión de todos los alimentos que entran en nuestro organismo. Es por eso mismo que vemos tantos productos que ayudan a la digestión que cuentan con Lactobacilos, microorganismos importantes en nuestros cuerpos que ayudan a tener una sana digestión.

Y es que realmente dentro de nuestro intestino se encuentra tanta vida variada que se podría comparar a la de una selva o mucho más. Pero a veces, esa vida que hay dentro de nosotros muere por distintas circunstancias y es cuando empezamos a tener problemas de digestión e instestinales.

Por lo general, algunos de los microbios esenciales para nuestra digestión se ven afectados de manera negativa por algunos medicamentos, principalmente por los antibióticos. Por eso es que se recomiendo NUNCA automedicarse y seguir las instrucciones de los médicos al pie de la letra, de lo contrario, podrían ocurrir muchos problemas con nuestro cuerpo.

Uno de esos problemas justamente se puede solucionar por medio del trasplante fecal, aunque es básicamente ya un caso muy extremo cuando esto se tiene que hacer.

¿Cómo funciona el trasplante fecal?

Ya habiendo aclarado el asunto, entonces podemos llegar a la conclusión de que, si la flora intestinal llega a tener problemas, entonces nosotros también los tendremos. Uno de esos problemas está relacionado con una bacteria que se llama C. difficile, la cual toma el control del intestino cuando gran parte de la vida dentro de este ha desaparecido.

La infección por C. difficile se podría solucionar por más antibióticos, pero el problema es que se caería en un ciclo interminable, dejando al paciente en un estado peor. Y ya que la infección de este microbio causa fuertes problemas de diarrea, algunos que incluso involucran sangre, los pacientes no están en posición de perder más flora intestinal. Una de estas infecciones incluso puede resultar letal.

Es por eso que se buscó una alternativa para tratar a esta infección de C. difficile y esa fue el trasplante fecal. No es un método convencional ni mucho menos, pero el procedimiento busca introducir las heces de una persona sana dentro del intestino de otra para que su intestino puede reponer la vida que perdió.

Es decir, dentro de las heces de una persona sana hay muchos microbios con los que se puede repoblar el intestino de la persona afectada y, de esa manera, recuperar la flora intestinal perdida.

¿Cómo se realiza el trasplante?

Como dijimos arriba, este es un tratamiento que se usa solamente en casos extremos y, además, aún se encuentra siendo estudiado y probado por algunos doctores alrededor del mundo.

Los métodos para realizar el trasplante no requieren de cirugía, pues se han intentado distintas maneras de lograrlo. Ya sea de manera oral (por medio de cápsulas) o por medio de un enema, una colonoscopia o incluso un tubo nasogástrico.

Por lo general se toman las heces de un familiar para que la flora sea similar a la del paciente y se toman muestras de sus heces, las cuales tienen a mezclarse con agua y se licúan de manera que sean más manejables.

Suena desagradable, obviamente, pero parece que este método ya ha logrado salvar la vida de algunas de algunas personas alrededor del mundo. Pero siendo un método relativamente nuevo, es complicado encontrar a alguien que sepa llevarlo a cabo actualmente.

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