Existen aplicaciones que ofrecen costos bajos de uso o pruebas gratis por un tiempo limitado, pero cuando intentas deshacerte de ellas, ya tienen tus datos de suscripción, debitándote dinero. Son las fleeceware.
PUBLICIDAD
En castellano se traducirían como “desplumadoras”, porque le quitan grandes cantidades de dinero a los usuarios. Lo más complicado es que no son maliciosas en sus códigos, ya que no roban tus datos ni intentan quedarse con tu dispositivo, pero sí aprovechan un vacío legal sobre el tiempo y el valor de la suscripción.
Los investigadores de Avast descubrieron 204 aplicaciones fleeceware tanto en la App Store como en Google Play Store, con más de mil millones de descarga. De acuerdo con la página, estas apps han recaudado más de 400 millones de dólares.
Ejemplos de apps fleeceware
Hay un ejemplo clave: algunas apps te ofrecen el período de prueba a cambio de los datos de tu tarjeta de crédito. Si los usuarios se aburren de la app, pueden desinstalarla. No obstante, la política de Google Play exige la finalización del período de prueba antes de realizar la desinstalación.
Muchos usuarios, como explica el portal Ayuda Ley Protección de Datos, no son conscientes de esto, y las aplicaciones de fleeceware cobran grandes cantidades de dinero una vez que finaliza el período. Afecta tanto a usuarios de Android como a los de iOS.
Explica Phone Arena que este tipo de apps incluyen el uso de instrumentos musicales, editores de imágenes, filtros de cámara, lectores de código QR y más. En App Store y Google Play Store existen programas similares, pero a mucho menor precio, o incluso gratis.
El portal lo considera una estafa al usuario, ya que ofrecen servicios comunes a un precio altísimo: el error está en no leer las letras chicas, o dejarse llevar por la “Descarga gratis” que anuncia la app.
De acuerdo con Avast, existen apps que cobran hasta 66 dólares a la semana, o 3.432 dólares al año. Mientras más tarde el usuario en quitar sus datos de suscripción, mayor es la estafa.
En promedio, las aplicaciones cobran de 4 a 12 dólares semanales, unos 208-624 dólares al año.
Al no ser consideradas maliciosas, tienen publicidades en Facebook, Instagram, Snapchat y TikTok.
Cuidado con los comentarios
La gran advertencia de Phone Arena para los usuarios es que revisen los comentarios antes de realizar la instalación de la app. Entre los comentarios que recopiló Avast sobre críticas a las apps es que “mi hija no tenía idea de que debías comprar esta estúpida aplicación para jugar. Cargó a mi tarjeta de crédito 53.36 dólares”.
Otro: “¡Evítenla! Mi hijo de 5 años la bajó sin mi consentimiento. Me descontaron 49.49 libras. Google no devolverá el dinero, tampoco el desarrollador. Una vergüenza”.
Uno más: “Decidí probar la aplicación por diversión, pero vi que costaba 50 dólares semanales (¡2.600 dólares al año!). Ese precio es completamente irrazonable para algo que, probablemente, apenas será utilizado por la mayoría de las personas”.
Tanto Google como Apple permiten cancelar suscripciones a aplicaciones, ambas en sus menús de configuración. Previamente, ambas compañías envían notificaciones a los usuarios si tienen suscripciones activas en aplicaciones no deseadas.
Los niños muchas veces ignoran esto, pero los padres deben estar al tanto, supervisando, para evitar cualquier daño al bolsillo.
Avast da un conjunto de consejos para evitar caer en el fleeceware:
- Ten cuidado con las pruebas gratuitas de menos de una semana, asegurándote saber de cuánto será el cobro.
- Lee los detalles sobre la aplicación.
- Mantente escéptico frente a los anuncios virales.
- Investiga otras aplicaciones antes de comprar, para saber si te ofrecen servicios similares a menor costo o, incluso, gratis.
- Blinda tus métodos de pagos, refuerza su seguridad.
- Conversa con tus hijos u otros familiares que tengan acceso a descargas de aplicaciones.