Es comprensible, desde un extraño punto vista, que el miedo a los termómetros infrarrojos haya aumentado. Y es que sí, no es algo que estábamos acostumbrados a ver y los conspiracionistas de siempre están creando teorías sin sustento.
Puede que al entrar a un Supermercado o tienda, el guardia o alguien a cargo te pida tomar tu temperatura, apuntando esta extraña pistola a tu cabeza por unos segundos, pero ¿está matando tus neuronas y causando un daño irreversible a nivel neurológico como te dijo tu tía por WhatsApp? La respuesta es no.
Es más, volver a tocar este tema nace de una experiencia que tuve el fin de semana, donde me tocó sacar el permiso correspondiente, ir a comprar y vivir algo tragicómico, una anécdota amigable que nos recuerda que las redes sociales pueden tener mucho poder:
Nos tocó venir al super y el muchacho que toma la temperatura lo está haciendo en el cuello, no en la frente ¿por qué? de acuerdo a él “porque mata neuronas poh es peligroso”
— Martín J. Calderón (@tinchocalderon) July 4, 2020
Varias respuestas apuntan a que les había pasado algo similar, y la verdad es que da lo mismo, a menos que vengas con mangas largas o guantes, eso podría dar un «falso positivo», pero el problema eran las razones, y quizás tiene que ver con una instrucción general por parte de Walmart, no lo sabemos.
Consultamos tres médicos al respecto y nos confirman que da lo mismo y que, es más, tomar la temperatura es una medida súper débil y que podría no ser muy indicativo, excepto en casos muy obvios. Es mejor pedir el permiso, el comprobante de que puedes estar afuera por X período de tiempo, y la misma cadena lo está exigiendo a cada cliente.
Si quieres saber más, hace un buen tiempo ya explicamos en detalle cómo funcionan estas máquinas, que no son láser, son infrarrojos, y que insistimos, no pueden hacerte daño: