Un grupo de investigadores y científicos que actualmente residen en la base española Juan Carlos I, ubicada en la Antártida, han declarado su reciente preocupación debido a las altas temperaturas que están afectando a la zona en las últimas semanas.
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En años normales, durante esta época las temperaturas se mantenían en torno a los 4° y 8° cómo máximo, pero durante los últimos días estas se han mantenido en forma constante en los 12°, según informó el grupo de expertos.
Durante el último mes, las noticias no han sido muy alentadoras para la Antártida, ya que en otros lugares como la base Argentina Esperanza, se registraron 20° de temperatura, mientras que en la base chilena Rey Jorge las temperaturas bordearon durante varios días los 18°.
Antártida y altas temperaturas
El grupo de científicos españoles que denunció esta situación, ahora se encuentra ubicado en la Isla Livingston, lugar que tampoco se salva de las temperaturas elevadas si se compara a la misma fecha del año pasado.
Lo que más llama la atención de los expertos es la notoria baja que ha tenido el glaciar durante el último año, mostrando cambios si se compara con la misma fecha del 2019. Sin embargo, la zona donde está ubicada la base Juan Carlos I es uno de los lugares más calurosos del continente Antártico.
En palabras del glaciólogo Ricardo Rodríguez a El País «Fíjate como iba de abrigado el año pasado por estas fechas y, desde luego, el glaciar no estaba como está ahora(…) y mira esas dos calvas del glaciar que tenemos en frente; no eran tan grandes la última vez que vine en 2016».
Las apreciaciones visuales de los científicos españoles deja en evidencia como el calentamiento global podría estar afectando la zona, que durante los últimas semanas ha presentado un clima errante si se compara con la lógica que mantenía durante años anteriores.
Sin embargo, como buena noticia, para los próximos días se espera la llegada de un frente frío en la zona, que ayudará en algo a regular las temperaturas en la zona, pero la pérdida de nieve y hielos será difícil de recuperar al corto plazo si las máximas de calor continúan siendo anormales en la zona.